¿Luka Romero a Boca? La historia del adolescente que batió un récord en España y ahora quiere empezar de nuevo en el equipo de su corazón
El enganche, de 19 años, evalúa la oferta xeneize ante la poca continuidad que tiene en Milan
La expectativa creció en estas horas cuando después Pepe Romero, abuelo del chico, amplió en DSports radio: “Boca necesita un jugador como Luka. La Serie B de Italia está descartada por completo. También tiene oferta del Alavés, pero Luka tiene posibilidades de venir a jugar a Argentina y él ama Argentina, a nosotros nos quedaría más cerca para verlo”, agregó en diálogo con DSports. Y luego se entusiasmó en radio La Red: “Tiene algo de todos los mejores jugadores. Tiene cosas de Messi y Maradona, y siempre que gambetea para adelante tiene una gran visión, como Bochini”.
Hay dos cosas ciertas: a Luka lo tienta la posibilidad de ponerse la camiseta de Boca, club con el que mostró simpatía en cada entrevista en la que lo consultaron al respecto. De hecho, en las últimas horas trascendió una foto suya cuando era un niño en la Bombonera. Aquella del 18 de julio de 2015 fue una tarde especial porque Carlos Tevez volvió a jugar con la camiseta azul y oro después de 11 años. Fue triunfo xeneize 2 a 1 con un golazo de Agustín Calleri de rabona y de emboquillada frente a... Quilmes, el club donde se inició su padre, Diego, también futbolista.
El otro asunto es que no todo depende de él y su entusiasmo por jugar en la Argentina, cerca de su familia. Porque está más que claro que desde lo económico el club de la Ribera no puede competir frente a los euros que puedan ofrecerle en Europa.
Un buen semestre en Boca, y sobre todo el hecho de tener continuidad, podría también acercarlo a la selección argentina sub 23, si es que pasa la barrera del Preolímpico: este año se disputarán los Juegos Olímpicos en París. De hecho, con Javier Mascherano como DT, formó parte del Mundial Sub 20 disputado el año pasado en la Argentina, cuando el equipo quedó eliminado en octavos de final. Su vínculo con la camiseta albiceleste no es nuevo. Previo a eso fue citado a la Sub 15 para el Sudamericano realizado en 2019.
Luka podría haber jugado para México (nació en el estado de Durango) o para España, ya que vivió muchos años en Mallorca. Pero no. Desde un primer instante afirmó que su sueño era representar a la Argentina. Aún después de nacer en México y criarse en España, por sus venas corre sangre celeste y blanca.
En Mallorca realizó realizó las divisiones inferiores y el 24 de junio de 2020 reescribió los libros al convertirse, con tan solo 15 años y 219 días, en el jugador más joven en debutar en la Liga de España, una marca que llevaba más de 80 años sin modificarse.
En suelo ibérico no era ningún desconocido. Un par de años antes había sonado fuerte la noticia de que había firmado un contrato por ocho años con la cantera de Mallorca, que se había adelantado a Real Madrid, Barcelona, Sevilla y Villarreal, entre otros, y se garantizó al juvenil. En el diario AS, el periodista Diego Alba contó que en el club catalán Luka dejó deslumbrados a más de uno cuando realizó una prueba en 2011, con casi siete años. El chico fue descubierto por Horacio Gaggioli, el mismo hombre que vinculó a Lionel Messi con Barcelona. Pero lo que truncó el fichaje fue que Barcelona no incorpora menores de 10 años que no vivan en La Masía. “Me quedaba muy lejos de mi casa”, resumió tiempo después.
En esa época fue filmado en una playa jugando a la pelota con Dani Alves, exlateral del club blaugrana, en las playas de Formentera. “Sáquenle las fotos a él, es Leo Messi”, pedía el brasileño a los curiosos que se acercaban a la improvisada reunión. La viralización de ese material tras el debut fue inmediata.
Cinco meses más tarde de su estreno en Primera, el 29 de noviembre de ese año marcó su primer gol y se lo dedicó a Maradona, que había pasado a la eternidad apenas cuatro días antes: " Cuando marqué el gol me puse a llorar. Pensando en mi padre, en mi madre, en la gente que me apoya. No me lo creía. Pensaba que era un sueño. Se lo dedico a Diego y a mi abuela Mabel, que me está mirando desde ahí arriba”.
En su ADN hay fútbol desde antes de nacer. Es hijo de Diego Romero, quien surgió en Quilmes y luego jugó en Atlético Rafaela, antes de emigrar y defender, entre otras, las camisetas de NK Mura (Eslovenia), Olmedo (Ecuador) y Alacranes de Durango, de la Liga Premier, de la segunda división mexicana. En esta última escala fue que nació Luka.
El descenso de Mallorca lo condujo a buscar nuevos horizontes. Entonces, en 2021 emigró a la Serie A de Italia para vestir la casaca de Lazio. Pero en el club de Roma fue mayormente suplente durante los dos años, en los que apenas acumuló 223 minutos en 14 partidos (uno solo como titular). Por la Copa Italia, la Europa League y la Conference League añadió otros 145 minutos en siete cotejos (apenas uno desde el comienzo). Y en esas esporádicas apariciones consiguió un gol, a Monza, en noviembre pasado.
En julio pasado llegó como agente libre al Milan. Y aunque las expectativas de ambas partes eran altas, lo cierto es que jugó menos de lo esperado (4 de los 20 partidos posibles hasta el momento). Por eso la necesidad de ambas partes de concretar una cesión a préstamo que le permita tener continuidad y consolidarse como titular. Eso sí, se dio el gusto de marcarle un golazo a Real Madrid en un amistoso.
Luego de aquel debut histórico en Mallorca, durante una entrevista realizada con el canal de YouTube “Hinchada Argentina TV”, le preguntaron por las comparaciones con Messi. “No me gusta que me comparen con Messi, Yo soy Luka”, respondió. Sobre el fútbol argentino, reconoció que le hubiera gustado entrenarse en algún equipo de nuestro país y que le gustaría jugar algún día en Quilmes. “Porque es donde jugó mi papá”, agregó.
Entonces le consultaron: “Si te llegan dos ofertas, ¿Boca o River?”. Lejos de eludir esa consulta espinosa, no dudó y dijo: “Boca”. La oferta xeneize ya llegó. Ahora, el que tiene que definir si el futuro sigue en Europa o si debutará en la primera división argentina en la Bombonera es él. Mientras, la expectativa y el entusiasmo en el pueblo boquense se acrecienta con el paso de las horas.