Estados Unidos evalúa desplegar armas nucleares en Reino Unido ante la creciente amenaza rusa
Por primera vez en 15 años, el gobierno norteamericano proyecta estacionar cabezas nucleares en la base de Lakenheath de la Fuerza Aérea Real, en Suffolk
Los documento revelados indican la preparación para una “misión nuclear” que se llevaría a cabo de manera inminente en la base de Lakenheath, localidad que ya había servido como depósito de armamento nuclear durante la Guerra Fría. Estas decisiones se enmarcan dentro de un programa de OTAN destinado a desarrollar y actualizar los sitios nucleares ante las tensiones elevadas con el Kremlin, especialmente después de la invasión de Ucrania en febrero de 2022. Rusia, por su parte, ha advertido que vería la colocación de armas estadounidenses en territorio británico como una “escalada”, comprometiéndose a tomar “medidas compensatorias”.
El Ministerio de Defensa del Reino Unido, manteniendo la política de largo plazo de la OTAN de no confirmar ni negar la presencia de armas nucleares en ubicaciones específicas, no ha ofrecido declaraciones concretas al respecto. Sin embargo, la noticia ha avivado el debate sobre la preparación y la capacidad militar del Reino Unido frente a potenciales conflictos. El secretario de la Armada de EEUU, Carlos Del Toro, ha instado al Reino Unido a “revaluar” el tamaño de sus fuerzas armadas dada “la amenaza que existe hoy en día”.
Estados Unidos retiró misiles nucleares de Reino Unido en 2008 tras evaluar que la amenaza de la Guerra Fría había disminuido. Sin embargo, esta nueva iniciativa de rearme nuclear refleja un cambio significativo en la percepción de la amenaza rusa y la respuesta de las potencias occidentales a la misma.
Este desarrollo representa no solo un refuerzo en las capacidades de disuasión y defensa de los aliados de la OTAN frente a Rusia, sino también un recordatorio de las tensiones geopolíticas cada vez más encendidas que caracterizan a nuestro tiempo. La implementación de estas medidas y las respuestas subsiguientes por parte de Rusia y otros actores globales definirán el futuro curso de la seguridad internacional.
El retorno de armamento nuclear estadounidense al territorio británico marca el fin de un período de distensión que se había mantenido desde 2008, cuando Estados Unidos retiró sus misiles nucleares de la misma base aérea considerando reducido el riesgo de confrontación con Rusia post-Guerra Fría. Contratos de adquisición muestran los planes de desarrollo de una nueva instalación en RAF Lakenheath, destinada al almacenamiento y operación de estas armas. El Ministerio de Defensa del Reino Unido, al ser consultado, mantuvo su política de no confirmar ni negar la presencia de armamento nuclear en locaciones específicas.
La decisión coincide con advertencias expresadas por oficiales militares y políticos de OTAN, quienes subrayan la necesidad de preparación ante un escenario de conflicto armado con Rusia. Admiral Rob Bauer y General Sir Patrick Sanders han sugerido que la sociedad debe estar lista para una guerra total, lo que ha generado debates sobre el aumento de efectivos militares en el Reino Unido.