Enero le devuelve alguna vaca sagrada a Xavi
El Barça confía en recuperar a Iñigo, Pedri y Ter Stegen durante el primer mes del año, aunque con el alemán tendría que esperar hasta inicios de febrero si se cumple la previsión de la doctora que le operó.
Lesionado en el bíceps femoral de la pierna derecha el 3 de diciembre durante el calentamiento previo al partido del Atlético de Madrid, y aunque no se especificó tiempo de baja, Iñigo Martínez debería estar cerca de reaparecer. La cercanía de la Supercopa, y el hecho de que todavía no haya vuelto a los entrenamientos, podría empujar a Xavi a no utilizarlo contra Las Palmas en Liga y Barbastro en la Copa. Antes de la lesión, Iñigo se había convertido en el referente de la defensa. Agresivo atrás, bien al corte, hasta había sido clave en el juego ofensivo. Filtró el pase inicial del gol de Guiu contra el Athletic y asistió a Ferran antes de que el valenciano provocase el penalti que decidió el partido contra el Alavés.
También puede volver pronto Pedri, lesionado en un entrenamiento después del partido contra el Valencia cuando empezaba a coger ritmo. La esperanza es que el canario pueda estar, como el central de Ondarroa, en la semifinal de la Supercopa que se juega en Riad el 11 de enero a las 22:00 (hora española). Xavi espera darle cierta continuidad al triángulo Gündodan-De Jong-Pedri. Apenas han podido jugar juntos esta temporada.
La reaparición que podría ir algo más para largo es la de Ter Stegen. El alemán, muy celoso de su ámbito privado, no quiso ofrecer demasiados datos sobre la endoscopia que se le practicó para solucionar sus problemas en la espalda. La doctora que lo intervino en Burdeos el 7 de diciembre, Amélie Léglise, estimó en dos meses la recuperación del portero. En el caso de Ter Stegen, el objetivo marcado es la eliminatoria de octavos de final de la Champions contra el Nápoles. Ganador de la vieja Copa de Europa en su primer año de azulgrana, en 2015, Ter Stegen tiene ganas de sacarse espinitas que se le han clavado estos años, desde el 2-8 contra el Bayern en Lisboa hasta el dramático 4-0 de Anfield, pasando por los 3-0 de Turín y Roma, el 1-4 del PSG