El grupo terrorista Hezbollah lanzó otra oleada de ataques contra el norte de Israel
La milicia chií libanesa confirmó las ofensivas contra “el enemigo” mientras Tel Aviv respondió con más fuego
El de Manara, precisó la milicia en un comunicado, fue en respuesta de las ofensivas “del enemigo contra aldeas y viviendas civiles” en el sur del Líbano y alcanzó -por lo menos- un inmueble.
En las restantes, se detectó el uso de misiles de alto calibre de tipo Burkan, unos proyectiles con capacidad para portar ojivas de hasta media tonelada, y otro tanto de “armas apropiadas” de las cuales no se consiguieron mayores detalles.
Luego de detectar “el lanzamiento de un misil antitanque hacia la zona de Gladiola”, la última ofensiva, el Ejército de Israel ordenó responder de inmediato y las tropas “atacaron el origen del fuego” momentos más tarde.
“Aviones de combate israelíes atacaron infraestructura terrorista y complejos militares de Hezbollah en el área de Hula, en el Líbano”, mientras tanques “dispararon para eliminar una amenaza” en Ayta ash Shab, sumaron desde la cartera castrense.
Por otro lado, informaron de un ataque contra “una célula terrorista” que fue identificada en un complejo en la zona de Marwahin, junto con varios objetivos responsables de ofensivas previas en Rosh HaNikra y el área de las Granjas de Cheba.
Este constante intercambio de fuego en la frontera, que en las últimas semanas se ha intensificado considerablemente, dejó a Israel y el Líbano al borde de una escalada en el conflicto, algo que la comunidad internacional trabaja arduamente por evitar.
“La probabilidad de una guerra en el norte es mayor que antes. Cuando sea necesario, avanzaremos con todas nuestras fuerzas”, dijo este miércoles el teniente general Herzi Halevi al concluir una visita durante el entrenamiento de los reservistas en esta zona.
“Estamos más preparados que nunca, para esta noche si es necesario, y continuaremos fortaleciendo nuestros preparativos para seguir adelante”, reiteró la víspera el jefe del Comando Norte del Ejército, Ori Gordin.
Esta situación, la peor en la zona desde la guerra de 2006, ya dejó a al menos 225 muertos del lado libanés -entre ellos, unos 170 de las filas del grupo terrorista-. Asimismo, se han neutralizado cerca de 750 posiciones militares allí, la mayoría de ellas de Hezbollah y unas pocas de Hamas.