Meta eliminó miles de cuentas chinas de Facebook que intentaban influir en las elecciones de EEUU e India
El gigante tecnológico desmanteló una enorme red que tenía como misión confundir a los electores estadounidenses e indios
“En lugar de crear su propio contenido, copiaban y pegaban contenido de personas reales, [incluidos] políticos estadounidenses de ambos lados del pasillo. Ninguno de ellos logró construir una audiencia auténtica”, escribió el gigante tecnológico.
La cuentas chinas, además de dirigir sus esfuerzos hacia Estados Unidos, cambiaron su enfoque hacia India, la mayor democracia del mundo, que elegirá a su gobierno nacional en abril y mayo de 2024. Meta reveló que una porción de las cuentas falsas alteró nombres y fotos de perfil, pasando de simular ser estadounidenses a supuestos residentes en India, e incidiendo en el conflicto de Beijing sobre el Tíbet.
La red que apuntaba a Tíbet y al estado del noreste indio de Arunachal Pradesh era más pequeña, con solo 13 cuentas y siete grupos eliminados por actividad fraudulenta. La mayoría de las cuentas falsas simulaban ser periodistas, abogados y activistas de derechos humanos, compartiendo enlaces a artículos de medios de comunicación estadounidenses reconocidos como HuffPost, Breitbart, The Wall Street Journal y Fox News.
Según denunció Meta, el régimen de China se posiciona como la tercera fuente más grande de cuentas fraudulentas (CIB) en Meta, detrás de Rusia e Irán.
Según el reporte de amenazas adversarias de Meta con fecha del 30 de noviembre, “estas redes han seguido luchando para construir audiencia y se han trasladado a plataformas más pequeñas, pero son una advertencia: los actores de amenazas extranjeras intentan llegar a audiencias antes de las elecciones del próximo año, incluyendo en EEUU y Europa, y necesitamos mantenernos alerta ante sus tácticas y objetivos en evolución”.
Para prepararse para las elecciones en EEUU e India, Meta cuenta actualmente con 40.000 empleados trabajando en seguridad e invirtió más de 20 mil millones de dólares en equipos y tecnología desde 2016. También dispone de una red independiente global de verificación de hechos, con más de 100 socios que revisan y califican la desinformación viral en más de 60 idiomas. Hasta la fecha, ha eliminado más de 200 campañas de influencia maligna que usaron CIB e identificó más de 700 grupos de odio en todo el mundo, incluyendo más de 400 organizaciones supremacistas blancas. Un informe del grupo de defensa en línea Avaaz indica que, antes de las elecciones de EEUU de 2020, hubo aproximadamente 10.1 mil millones de visualizaciones de páginas prominentes que compartieron repetidamente desinformación en Facebook y casi 100 millones de votantes en EEUU vieron contenido sobre fraude electoral en la plataforma antes de dicha elección.
El régimen de China espía a Occidente
Según investigadores y responsables de inteligencia de los países occidentales, China se ha hecho experta en el hackeo de sistemas informáticos de naciones rivales, para obtener secretos industriales y comerciales.
Estados Unidos, sus aliados y la OTAN imputaron en 2021 al gobierno chino un pirateo masivo al gigante informático Microsoft, para acceder a correos electrónicos y captar informaciones confidenciales de particulares y empresas.
También se sospecha que piratas informáticos chinos actuaron en Estados Unidos contra el Departamento de Energía, servicios públicos, empresas de telecomunicaciones y universidades, según Washington y la prensa.
Estados Unidos multiplica sus advertencias contra la aplicación TikTok y el riesgo que sus vínculos con China podría acarrear en la seguridad nacional.
Algunos legisladores temen que la casa matriz de TikTok, el grupo chino ByteDance, pueda acceder a datos personales de los usuarios estadounidenses y transmitirlos a las autoridades chinas.
Washington puso en la lista negra al grupo Huawei, conocido por sus teléfonos móviles pero también como suministrador de equipos para las redes y la 5G.
Estados Unidos teme que estos productos sirvan de acceso para vigilar las comunicaciones y la circulación de datos, lo que Huawei niega.