Mbappé-Luis Enrique, se afilan los cuchillos
La relación entre ambos atraviesa un momento crítico que ha alcanzado un punto álgido durante la última semana.
Después, ambos protagonizaron un cruce de palabras en el que el fuerte ego de los dos pudo desembocar en una disputa que no fue a mayores. Luis Enrique defendió su postura dos días después, asegurando que bajar el ritmo en Dortmund fue, sin duda, “una de las mejores decisiones de su carrera”, entendiendo, a su vez, la frustración de Mbappé, que discrepó con la decisión de su entrenador.
Días después, en Lille, en un partido trascendental, el PSG empató a uno contra el conjunto norteño, gracias a un gol en el último minuto de Jonathan David. Antes, de penalti, Mbappé había marcado el 0-1, pero su inexistente celebración, mostrando indiferencia, pudo interpretarse como toda una declaración de intenciones, ya fuera por su posición en el campo, de ‘9′, o por no estar cómodo en el sistema de Luis Enrique.
Tras el empate en el Pierre Mauroy, a Luis Enrique se le preguntó por el ánimo del francés, además de su posición de referencia. El exseleccionador español, contundente, apostilló que “Mbappé juega dónde él decida”, además de lanzar una indirecta respecto a su supuesta frustración, esgrimiendo que no disponía de “poder para ello”. Un mensaje que se interpretó, a tenor de las declaraciones, como un ensalzamiento del poder que ostenta Mbappé en el equipo.
El talento de Bondy, máximo goleador sin discusión de la Liga Francesa, con 16 tantos en 16 jornadas, ya protagonizó la temporada pasada un episodio similar. Su entrenador por aquel entonces, Galtier, decidió colocarle como 9, generando un debate en el que Mbappé ironizó en las redes sociales (el famoso #PivotGang) y con el que reconoció, en un partido con Francia, que se sentía mucho más cómodo con una referencia por delante que le hiciera aclarados. “Eso en el PSG no existe”, dijo.
La relación del campeón del mundo en 2018 con Luis Enrique ha sido cordial desde el inicio de temporada, pero tampoco se atisba una afinidad total entre los dos. El respeto es mutuo, de eso no hay duda, pero las últimas declaraciones de Lucho y la actitud del jugador en el campo son signos esclarecedores de que algo se ha torcido. En París le quitan hierro al asunto y ponen en valor que el equipo está líder en la Liga y que, además, consiguió, con suspense, la clasificación a los octavos de la Champions en el grupo de la muerte.
¿Será un impedimento la relación de Mbappé con Luis Enrique para una posible renovación? No se puede determinar ahora mismo, pero una de las condiciones que puso el francés, en su renovación por dos temporadas en 2022, es que el entrenador elegido debía potenciarle. En los últimos cuatro encuentros, el gijonés le ha reubicado a la posición de nueve, algo que la temporada pasada no le gustó al capitán de Les Bleus. A partir de enero, el club entablará las negociaciones para renovarle, por lo que intentará reconducir una situación, ya que cualquier mínimo detalle puede ser relevante tanto a favor como en contra, que ha provocado rencillas entre el futbolista y el exentrenador del Barcelona.