Estados Unidos dejó atrás las huellas demográficas de la pandemia: menos muertes y una población creciente
El crecimiento poblacional estadounidense se acelera levemente, con el sur del país liderando la expansión y una mayor cantidad de estados experimentando incrementos de ciudadanos
“El regreso de la migración estadounidense a los niveles prepandémicos y la caída de las muertes están impulsando el crecimiento del país”, dijo Wilder.
“Aunque los nacimientos disminuyeron, esto se vio atenuado por la disminución de casi el 9% en las muertes. En última instancia, menos muertes junto con un repunte de la inmigración dieron como resultado que la nación experimentara su mayor aumento de población desde 2018″, agregó la experta.
El crecimiento se observó en más estados en comparación a cualquier año desde el inicio de la pandemia. La región Sur agregó más de 1,4 millones de residentes, lo que representa el 87% del crecimiento nacional y mantiene su tendencia de crecimiento incluso durante la crisis sanitaria.
Mientras tanto, el Medio Oeste experimentó un incremento moderado del 0,2%, en respuesta a una disminución de la emigración, mayor migración internacional y la recuperación demográfica en estados como Indiana y Ohio. A pesar de enfrentar una pérdida de población, el Oeste también vio un aumento de 137.299 personas, mientras que el Noreste redujo su declive poblacional con una disminución mucho menor que en años anteriores.
Texas se posiciona como el estado con el mayor cambio numérico, sumando 473.453 personas, seguido por Florida con un incremento de 365.205 habitantes. Florida y Carolina del Sur son los estados de más rápido crecimiento, con aumentos del 1,7% y 1,6% respectivamente.
Por otro lado, ocho estados vieron disminuir su población en 2023, incluyendo a California, Illinois y Nueva York, aunque con descensos menos pronunciados en comparación con el año anterior. En contraste, Puerto Rico continua una tendencia a la baja en la población, pero con una tasa de declive que se ralentiza y un leve incremento en la migración neta por primera vez desde el comienzo de la pandemia.
Estos datos nos brindan una visión más clara de cómo la población de Estados Unidos está evolucionando y adaptándose en la etapa pospandémica, perfilando un escenario de resiliencia y cambio en la demografía nacional.