Enzo Francescoli también salió a defender a Martín Demichelis: “No entiendo por qué debería irse”
El secretario deportivo de River defendió al DT elegido hace un año para reemplazar a Marcelo Gallardo
En este sentido, adelantó: “Nosotros desde el club estamos con la tranquilidad suficiente de ver el todo y hace muchos años que nos estamos manejando de una manera. Se dio un paso que era difícil, como la sucesión de Gallardo, y hay mucho mérito de Martín”, puntualizó.
“No sé cuántos de los que hoy hablan del entrenador, cuando se fue Gallardo hubieran pensado que podíamos salir campeones como salimos y jugando como se lo hizo, con tanta diferencia con el resto de los equipos”, valoró el Príncipe. Y agregó: “Esto es fútbol, entiendo todo y estuve adentro, pero no busquemos culpables donde no los hay. Echarle la culpa a Demichelis no es justo, paremos. Estoy amargado por no haber ganado más cosas, pero miremos la parte buena de todo lo que se hizo”.
En un resumen de lo realizado en 2023, Francescoli destacó: “El balance del año no cambia con la eliminación de la Copa Libertadores. A veces pasa que tenés un plantel corto y las lesiones te complican y en otras tenés uno largo y una eliminación te complica. Es fútbol”. Y ante la consulta sobre la continuidad de Enzo Pérez, opinó: “Es algo que debe decidir él mismo. Nos dio mucho, pero falta un partido importante y esperemos a ver qué pasa”.
Finalmente, se refirió al mercado de pases y comentó que no hay nada concreto, ya que el plantel es abundante: “Si se va algún jugador, todavía vamos a estar bien, no creo que haya muchos movimientos en el mercado, pero se verá, no me lo planteó Martín (Demichelis)”.
No fue el único del club de Núñez que salió a bancar públicamente al DT. El martes, el propio presidente, Jorge Brito, estuvo en la misma sintonía. “No está en revisión la continuidad de Demichelis. Planificamos 2024 convencidos de que tenemos un gran plantel, de los mejores del fútbol sudamericano, y que vamos a dar pelea en la Libertadores. Estamos unidos para lo que viene. Hemos tenido un año con cosas muy lindas y partidos claves que hemos perdido”, expresó en una entrevista con TyC Sports.
Todo esto es una consecuencia del impacto que generó la derrota del sábado ante Rosario Central, en donde River no pudo anotar ninguno de los cuatro penales ejectuados en la definición (tres atajados por Jorge Broun y el otro muy desviado) y quedó eliminado en las semifinales de la Copa de la Liga.
Tras la frustrante caída, Demichelis había hecho declaraciones al menos curiosas. “Me sigo sintiendo con fuerza para lo que viene”, remarcó. Como atajándose de una posible puesta en duda de su continuidad. Lo cierto es que la caída en semifinales de la Copa de la Liga ante Rosario Central por penales volvió a exponer un irregular y extraño segundo semestre de River. Y el DT empieza a cerrar un año repleto de vaivenes emocionales en su primera experiencia como entrenador profesional. De aquel DT campeón que conquistó al Monumental rápidamente a este presente que ya genera controversia dentro del hincha millonario. Una situación realmente impensada cinco meses atrás.
El entrenador, que parecía destinado a la grandeza en la primera parte del año, fue desdibujando su imagen con el correr de los meses. Influyeron, también, los rumores de cortocircuitos con varios integrantes del plantel -en especial con los más grandes- por cuestionamientos -de él hacia sus dirigidos- que se filtraron a la prensa.
Si deportivamente River atravesaba en septiembre el momento más crítico del ciclo de Martín Demichelis, por esas horas todo se agitó todavía más con una explosión mediática alejada de la habitual impenetrabilidad del predio del club en Ezeiza. Durante esos días se filtraron supuestas declaraciones del entrenador millonario en una reunión ‘off the record’ con periodistas que causaron incomodidad y malestar en el plantel profesional. Y en medio de un contexto deportivo negativo, sin Copa Libertadores ni Copa Argentina, y con dos derrotas en las tres primeras fechas de la Copa de la Liga, el clima interno se desestabilizó. Todo esto es innegable.
La difícil transición
Martín Demichelis asumió como técnico de River el 16 de noviembre del año pasado. . El desafío era gigantesco, porque debía suceder a Marcelo Gallardo, líder durante 8 años y medio de la era más exitosa de la historia del club millonario. Y durante los primeros meses todo fue muy positivo, al punto que la sombra del Muñeco dejó de hacerle mella, e incluso hubo momentos en donde River desplegó un fútbol de alto vuelo, donde jugó mucho mejor que durante todo 2022, el más flojo del cuerpo técnico anterior.
Pero el año del conjunto millonario se divide en dos. Una parte, hasta julio; la otra, posterior a ese mes. En la primera porción conquistó al hincha con su juego, se lució futbolísticamente, construyó una enorme fortaleza en el Monumental y ganó la Liga Profesional sin discusión. En la segunda parte sufrió tres tempranos golpes en la Copa Libertadores (eliminado en octavos de final ante Inter, de Porto Alegre), la Copa Argentina (afuera en 16vos de final ante Talleres) y la Copa de la Liga (fue segundo de Huracán en la Zona A y perdió por penales en las semifinales ante Rosario Central, en donde no convirtió ningún remate de la definición), tuvo rendimientos colectivos e individuales más inconstantes, perdió seguridad y sufrió más de la cuenta, sobre todo en condición de visitante. Así y todo, no solamente ganó los dos superclásicos del año y le sacó 18 puntos de ventaja al escolta Talleres en la tabla anual, sino que además espera por el Trofeo de Campeones, que jugará el 22 de diciembre ante Platense o Central.
En este contexto, el trabajo de Demichelis como entrenador todavía tiene una amplia y exigente lupa encima. Quizás la vara quedó realmente alta tras el ciclo más exitoso de la historia, liderado por Marcelo Gallardo durante ocho años, y contraste con la espuma de los primeros meses satisfactorios, hoy el DT está expuesto a críticas y cuestionamientos por sus decisiones, mientras el nivel del equipo aún no se encarrila. Por eso, la percepción es que con la derrota ante Central Demichelis perdió espaldas. Y por eso es que Brito y Francescoli salieron a sostenerlo públicamente.