El refuerzo de Scott McTominay alivia la presión sobre Erik ten Hag con el triunfo sobre Chelsea
SCOTT MCTOMINAY disparó su segundo doblete de la temporada para quitarle la presión a Erik ten Hag una vez más.
Qué aliviado debe estar el holandés por no haber encontrado nunca un comprador para el centrocampista durante el verano, ya que su renacimiento continúa.
Era el 7 de octubre cuando, después de seis derrotas en sus diez primeros partidos en todas las competiciones, se encontraban perdiendo 1-0 en casa ante el Brentford .
McTominay dio un paso adelante con dos goles dramáticos en el tiempo de descuento para tomar la delantera.
Aquí, con más signos de interrogación flotando sobre la cabeza del manager Ten Hag, volvió a ser el hombre del momento .
Marcó en los minutos 19 y 69, a ambos lados del empate de Cole Palmer justo en el descanso.
Fue una victoria muy necesaria después de la deslucida derrota de los Red Devils el sábado pasado en St. James' Park.
Ten Hag no ha tenido miedo de tomar decisiones importantes desde que se convirtió en el técnico del Manchester United.
Y hubo otros dos de cada cuatro cambios en su alineación con Marcus Rashford y Anthony Martial en el banquillo .
¿O fue una decisión tan importante después de sus actuaciones contra Newcastle, donde ambos quedaron enganchados durante 61 minutos?
Rashford ha sido pobre toda la temporada, mientras que Martial no debería estar ni cerca de una camiseta del United.
Ten Hag había defendido a Martial la víspera del partido cuando le dijeron que era hora de deshacerse del francés, claramente había decidido hacerlo de todos modos.
Entonces, en sus lugares entraron en acción Rasmus Hojlund y Antony , quienes habían pasado parte de esta semana quejándose en un canal de fans porque lo critican.
Pero los cambios funcionaron cuando United tuvo un excelente comienzo de juego que hizo vibrar a Old Trafford .
Bruno Fernandes orquestaba, Alejandro Garnacho derribaba las bandas y McTominay tenía esa amenaza de gol sobre él.
Buscando su primer gol en la Premier League, Hojlund estuvo cerca con un disparo cruzado que Robert Sánchez desvió en toda su extensión.
Luego, a los seis minutos, llegó el penalti para los locales.
Antony estaba dispuesto a responder a sus detractores y cuando se metió en el área, Enzo Fernández se cruzó y le puso sus tacos en el pie.
No fue evidente de inmediato que hubiera habido una falta, pero el VAR David Coote llamó al árbitro Chris Kavanagh hacia la pantalla y después de varias vistas, dio el penalti.
Se levantó el Capitán Fernandes, con su salto, paso y salto pero fue una mala patada débil , un metro dentro del poste izquierdo y Sánchez salvó.
Garnacho aprovechó el balón suelto pero disparó desviado.
El United mantuvo el ritmo, presionó alto y consiguió su merecida ventaja.
Nicolas Jackson del Chelsea perdió el balón ante Sofyan Amrabat y la jugada pasó por Fernandes y Garnacho, quienes devolvieron un centro.
Maguire fue el primero en alcanzarlo con un tiro, pero cuando fue bloqueado, McTominay estaba allí con el balón saltando con un pie y disparando al otro lado.
El internacional escocés que ayudó a llevar a su país a la final de la Eurocopa casi logró su segundo poco después.
Cuando Fernandes centró, dio un salto imponente y un cabezazo que se salvó. El balón volvió a él e instintivamente sacó un pie, pero sólo pudo dirigir su disparo a corta distancia directamente hacia el portero.
El United estaba jugando un juego un poco arriesgado, empujando tan alto en un ataque total y ocasionalmente lo atrapaban en el contraataque.
En uno de ellos, Mykhailo Mudryk disparó desviado, luego, cuando el mismo jugador deslizó un balón hacia Palmer, mostró su clase.
Con el balón pegado a su dedo del pie, pasó por encima de Victor Lindelof y Maguire antes de devolver un tiro raso hacia el otro lado, hacia la esquina inferior más alejada.
El United debió haberse ido al descanso preguntándose cómo era posible que estuvieran empatados.
Este Chelsea es vulnerable, como señaló Ten Hag en el período previo al partido afirmando que "no les gusta defender".
Sin embargo, pueden anotar, llegando recién llegados de una victoria por 3-2 sobre Brighton después de jugar la segunda mitad contra diez hombres tras la expulsión de Connor Gallagher.
Puede que esa haya sido sólo su segunda victoria en seis, pero entre ellas hubo empates impresionantes con el Arsenal , 2-2, y el triple campeón Manchester City , 4-4.
Así que el United sabía que todavía tenía una pelea entre manos y un poco de tensión pareció apoderarse de ellos al comienzo de la segunda mitad con el temor de perder más puntos.
Reafirmaron su dominio a la hora de juego, cuando Antony tuvo un disparo desviado por poco.
Luego, desde la esquina de Shaw, un cabezazo de McTominay encontró el objetivo y el portero.
Garnacho era eléctrico, pero cuando recogió un centro alto en lugar de correr por el suelo, Hojlund no estaba contento.
Impávido, el internacional argentino de 19 años siguió adelante. Encontrado por el sustituto Sergio Reguillón, esta vez su centro alto fue justo lo que se necesitaba y McTominay cabeceó a casa.
Ten Hag paseaba ansiosamente por su área técnica mientras transcurrían los cuatro minutos añadidos, pero esta sería una victoria bien merecida.
