Unos 200 mil menores de 18 años en EE.UU. fueron diagnosticados de artritis: cuáles son las causas
Las cifras corresponden a una investigación de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de ese país. Por qué no es solo una enfermedad de personas mayores
La investigación de los CDC resalta la necesidad de priorizar a la población infantil y adolescente en las estrategias de prevención y tratamiento contra la artritis. Esto implica identificar los factores de riesgo de la enfermedad, promover la actividad física, el control del peso y el uso de servicios de salud mental. Abordar los determinantes sociales de la salud y factores sistémicos también es fundamental para mitigar las discrepancias en la prevalencia de este problema.
Además, de acuerdo con este estudio, las pautas de tratamiento de esta dolencia para niños y adolescentes incluyen terapia y fármacos. Los antirreumáticos, que ayudan a preservar las articulaciones bloqueando o retardando la inflamación, y los medicamentos antiinflamatorios no esteroides para tratar la rigidez, el dolor y la fiebre.
Según los CDC, prevenir esta enfermedad entre niños y adolescente, “el diagnóstico temprano y el tratamiento oportuno pueden prevenir el daño articular permanente, mejorar los resultados de salud, reducir las disparidades en la salud y mantener la calidad de vida”.
¿Qué es la artritis?
La artritis es una inflamación de una o más de tus articulaciones. Los principales síntomas suelen ser el dolor y la rigidez, los cuales suelen empeorar con la edad.
Por otro lado, la segunda es un trastorno autoinmune en el cual el sistema inmunológico del cuerpo ataca los revestimientos de las articulaciones, provocando una inflamación que puede resultar en daño en los huesos y erosión articular.
Aunque, también se encuentra la artritis idiopática juvenil (AIJ) que es un conjunto de trastornos inflamatorios que afectan a niños y adolescentes menores de 16 años, persistiendo por mínimo 6 semanas.
Los signos más frecuentes de esta enfermedad incluyen rigidez en las articulaciones, con dolores específicos en las rodillas, tobillos, muñecas, manos y codos. Además, una complicación que puede surgir en esta condición es la uveítis, que es una inflamación en los ojos.
Consejos para hacer ejercicios a un paciente con artritis
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) brindó cinco recomendaciones a las personas que sufren artritis y quieren practicar ejercicios:
- Inicie gradualmente la actividad física prestando atención a la tolerancia de su cuerpo a los nuevos niveles de actividad. Comience con pequeñas cantidades e incremente el tiempo y la intensidad lentamente.
- Cuando los síntomas de artritis aumenten, ajuste su actividad para mantenerse activo sin empeorarlos.
- Escoja actividades de bajo impacto para las articulaciones, como caminar, ciclismo, aeróbic acuático o baile.
- Busque espacios seguros y adecuados para la realización de su actividad física. Considere clases de ejercicios si aún no tiene un programa de actividad física.
- Consulte con un profesional de la salud o un especialista en ejercicio certificado para adaptar su actividad a sus capacidades y objetivos de salud.