Los primeros cuatro síntomas que alertan sobre el bajo nivel de magnesio en el cuerpo
Es un mineral fundamental en el control del azúcar en la sangre y la función muscular. La cantidad recomendada varía entre hombres y mujeres. En qué alimentos se encuentra
Cuando tenemos un bajo nivel de este mineral, comenzamos a experimentar diversos síntomas que pueden pasar desapercibidos, pero a los que hay que prestarles atención. En un estudio publicado en MDPI (Multidisciplinary Digital Publishing Institute), una editorial de revistas científicas, se sostiene que los primeros cuatro síntomas de un bajo nivel de magnesio son debilidad muscular, pérdida de apetito, fatiga, náuseas y vómitos.
1. Debilidad muscular
La debilidad muscular como uno de los síntomas asociados a un bajo nivel de magnesio se debe a que la deficiencia de este nutriente altera procesos esenciales tales como la contracción muscular y la transmisión de impulsos nerviosos en las células musculares, lo cual tiene el potencial de causar debilidad muscular.
2. Pérdida de apetito
La pérdida de apetito debido a falta de consumir suficiente magnesio es la consecuencia de otros síntomas como lo son las náuseas y los vómitos. La sensación desagradable que ambos tipos de malestar provocan en el estómago da como resultado que las ganas de ingerir alimentos disminuya.
3. Fatiga
La importancia de consumir una cantidad adecuada de magnesio reside en su amplia influencia en diversas funciones del organismo. En este caso, la fatiga está relacionada con la debilidad muscular porque un nivel bajo de magnesio puede desencadenar un desequilibrio en sustancias importantes como el potasio.
4. Náuseas y vómitos
El magnesio contribuye con la regulación de algunos neurotransmisores en el cerebro, como la serotonina, que se encarga de controlar la aparición de náuseas y vómitos. Además, este nutriente también interviene en la regulación de las contracciones musculares que pueden calmar el malestar estomacal, lo que lleva a una reducción de las náuseas y los vómitos. Cuando existe un bajo nivel de magnesio, el malestar estomacal es un indicativo de la deficiencia de este importante nutriente.
Alimentación saludable y suplemento de magnesio
Consumir la cantidad adecuada de magnesio se puede lograr de dos maneras: a través de una alimentación saludable o del consumo de un suplemento nutricional.
Una alimentación saludable debe incluir alimentos ricos en este mineral como son los que recomienda el NIH: las semillas de calabaza, las almendras, la espinaca, la leche de soya, los frijoles negros, el yogurt natural, la avena instantánea, los plátanos (o bananas), el salmón, el pan de trigo, el pollo, el aguacate (o palta) y las pasas.
También se puede optar por el consumo de magnesio en forma de suplemento, que hoy en día goza de popularidad en el mercado de los suplementos multivitamínicos.
Pero los especialistas dicen que la mayoría de las personas cubren su requerimiento diario de este mineral con una dieta variada, por eso se debe consultar a un profesional de la salud para asegurarte si necesitas un suplemento y qué tipo de suplementación es la adecuada para cada persona. Ya que el uso de suplemento de magnesio puede implicar riesgos si el requerimiento diario de este nutriente ya ha sido cubierto