La inesperada polémica detrás del try anulado que hubiera cambiado el destino de la final del Mundial de rugby
La World Rugby le habría “admitido” a los All Blacks de un error durante la final frente a Sudáfrica que modificaba la historia del partido en el que los Springboks vencieron 12-11
La polémica en cuestión se produjo en el minuto 54 de la tensa final tras una brillante acción individual de Richie Mo’unga que finalizó con una asistencia para el mítico medioscrum. Sin embargo, luego de los abrazos el try fue anulado por la tecnología: Tom Foley detectó un knock on en el lineout que abrió la jugada y el árbitro Wayne Barnes anuló la jugada en cuestión. Sin embargo, la caída del balón ocurrió cuatro fases antes del try de Smith y el reglamento aclara que el TMO sólo tiene el poder de mirar hacia atrás dos fases en el armado de un try.
World Rugby actualizó esta regla a mediados de 2022, emitiendo un comunicado que establecía que las derivaciones del TMO eran posibles para “todas las infracciones claras y obvias de knock-on o pase forward dentro de las dos fases previas a un posible try”. Cuatro minutos después de que se anulara el try, fue quien Beauden Barrett apoyó para los All Blacks pero en una posición menos ventajosa para el intento de conversión de Mo’unga que significaban dos valiosos puntos extras para Nueva Zelanda que hubiesen significado el título.
Más allá de las presiones que recibieron las autoridades que rigen el deporte, decidieron sacar un comunicado para desmentir la información del medio Stuff. “Como se confirmó antes de la Copa del Mundo de Rugby 2023, World Rugby no comenta públicamente las decisiones de los árbitros de partido. Respaldamos a nuestro destacado equipo de árbitros de partidos, que realiza uno de los trabajos más difíciles en el deporte profesional a un nivel excepcional”, recitó el escrito.
Y concluyó en defensa de los jueces: “Como hemos visto en los últimos meses, lamentablemente, las críticas a los árbitros pueden tener consecuencias de gran alcance, incluyendo el odio y las amenazas en línea, y debemos ser conscientes de tal impacto humano”. Pero más allá de las quejas o arrepentimientos que puedan aparecer luego de la final del Mundial, el trofeo ya está dentro de la vitrina de Sudáfrica y no hay nada que se pueda hacer para sacar a los Springboks de lo más alto del rugby.