GRUPO A | COPENHAGUE 4 - M. UNITED 3 / Agonía infinita del United
El Copenhague igualó un 0-2 en contra en un partido que fue una la lluvia de goles. La expulsión de Rashford lastró a los diablos rojos. Bardghji hizo el definitivo 4-3.
Y eso que antes de alcanzar la media hora de juego vencían por 0-2. Con relativa comodidad. Hojlund se erigió en los primeros minutos como protagonista. El danés, que debutó como profesional en el Copenhague, marcó dos goles a placer. El primero a los tres minutos después de una buena acción individual de Wan-Bissaka y un pase de la muerte de McTominay. Hojlund solo tuvo que empujar el esférico a la red, como en el minuto 27 cuando recogió el rechace después de que Garnacho finalizase un contraataque disparando desde la derecha. Balón suelto, y luego a la red.
Se las prometía felices el United, pese a que Ten Hag tuvo que tirar de Varane después de que Evans se lesionase en el primer cuarto de hora de juego. Según se acercaba el descanso, el panorama empeoró para los mancunianos. Primero, Rashford fue expulsado con roja directa después de dar un pisotón a Jelert. Cobró vida el Copenhague, que tuvo una ocasión en la acción inmediatamente posterior. Fernandes desvió un centro de Gonçalves al travesaño. Apenas unos segundos más tarde, el propio Gonçalves dejó el balón en bandeja para la llegada de Elyounoussi, que agradeció la asistencia marcando.
Hubo trece minutos de descuento, y hubo todavía mayor dramatismo. En el séptimo del añadido, tanto Varane como Maguire tocaron el balón con la mano después de que los locales lo colgasen al área. El cuarto penalti en contra para el United en la presente Liga de Campeones. Uno por partido. Onana detuvo el último, a Larsson, hace dos semanas en Old Trafford, pero no pudo hacer nada ante el disparo de Gonçalves desde los once metros. En diez minutos, el equipo de Ten Hag se derrumbó.
El Copenhague salió dispuesto a aprovechar la circunstancia tras la reanudación. Decididos, apretando y poniendo en apuros a Onana, y también a la participación mancuniana en la Liga de Campeones. Fernandes creyó salvar a los suyos a veinte minutos para el final cuando transformó enfáticamente una pena máxima. Ganaron en confianza los visitantes, justo antes de hacerse añicos. Nuevamente. Es la agonía infinita del United, un equipo que no levanta cabeza. Y una zaga que sigue repitiendo los mismos errores una y otra vez. Lerager llegó solo al área pequeña para rematar un balón colgado y poner las tablas en el marcador. Los diablos rojos terminaron de caer en el infierno cuando se le escaparon los puntos cuatro minutos después. Bardghji terminó con cualquier atisbo de reacción del United marcando y poniendo el grupo patas arriba.