Golpe del Gobierno británico a los clubes estado

El primer ministro Rishi Sunak confirmó la creación de un regulador independiente del fútbol “para salvaguardar el futuro de los clubes ingleses”.

Pablo Montaño

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La creación de un regulador independiente para el fútbol inglés sobrevolaba las islas británicas desde 2021, con la propuesta del Gobierno británico entonces denominada como White Paper. Un proyecto para reformar el fútbol inglés que está cada vez más cerca de convertirse en realidad. “El colapso del Bury FC, el devastador impacto de la pandemia en los clubes y el chapucero plan para crear una esta europea han puesto de manifiesto la insostenibilidad financiera de algunos clubes y la necesidad de una mayor responsabilidad para con los aficionados”, declaró Rishi Sunak, primer ministro británico, durante el discurso del rey Carlos III en la inauguración del Parlamento británico el pasado martes.

De esta manera, el nuevo gestor del fútbol inglés, que se hará cargo las cinco categorías superiores del fútbol masculino inglés y se pondrá en marcha a partir del próximo año 2024, tendrá competencias para “actuar en cuestiones como el cumplimiento de la normativa financiera, la gobernanza corporativa y el compromiso de los aficionados. Se impondrán pruebas más estrictas a los propietarios de los clubes, se introducirán normas mínimas de participación de los aficionados y no se permitirá que los clubes se unan a ligas disidentes o sin licencia”. Es decir, su creación pretende poner coto a la creación de nuevos clubes estado, tal y como podía ocurrir con el Manchester United y la compra del club por parte de Qatar, además de tener implicaciones sobre la posible organización de la Superliga.

En palabras del propio rey Carlos III, “se presentarán leyes para salvaguardar el futuro de los clubes de fútbol para las comunidades y los aficionados”. Si bien desde la Premier League no compartían la idea del Gobierno británico, afirmando en un comunicado que “es vital que esta regulación no dañe el deporte que los aficionados aman o su capacidad para atraer inversiones o aumentar el interés en nuestro deporte”, ya que el nuevo regulador independiente del fútbol inglés le quitaría poder y espantaría a posibles inversores, en Inglaterra afirman que “los clubes pierden dinero constantemente y dependen de la financiación externa, con un nivel de endeudamiento cada vez mayor”.

La creación del denominado en las islas británicas como The IREF, además de mediar en disputas, pretende prohibir que los clubes puedan unirse a ligas externas como la Superliga europea, mejorar el test a dueños y propietarios para evitar problemas económicos en los clubes, mejorar la representación del aficionado para que tenga poder de decisión y mejorar el reparto de dinero en la pirámide del fútbol inglés, podría también intervenir en la distribución de los derechos televisivos. Los ingresos totales de la liga inglesa ascendieron a 5.500 millones de libras en la temporada 2021-2022, cuando se propuso el White Paper, frente a los 2.800 millones de LaLiga española”.