Estados Unidos emitió otra ronda de sanciones contra más de un centenar de empresas e individuos que apoyan a Rusia

Washington ratificó su compromiso con el desmantelamiento de estos canales de asistencia de los que se vale el Kremlin para continuar con su ofensiva y prometió responsabilizar a cada uno de los implicados

Infobae

Estados Unidos emitió este jueves una nueva ronda de sanciones contra 130 empresas e individuos por brindar asistencia a Rusia y permitirle seguir abasteciéndose de material bélico para su ofensiva en Ucrania. En esta oportunidad, los alcanzados por la medida están tanto en Moscú como en Turquía, China y los Emiratos Árabes Unidos (EAU).

Según puntualizó el Departamento del Tesoro en un comunicado, se trata de actores que han “favorecido la guerra de Rusia al entregar al país la tan ansiada tecnología y equipamiento que necesita”, como es el caso del ciudadano turco Berk Turken y sus compañías, señaladas de supuestos vínculos con la inteligencia de Moscú. Documentos recopilados por Washington dan cuenta de pagos y maniobras diseñadas especialmente para eludir las sanciones de Occidente y trasladar mercancías entre los países.

En tanto, en los EAU fue alcanzada ARX Financial Engineering Ltd. por el envío de equipos de aviación, máquinas para la recepción de datos y realizar operaciones con las que transferir rublos desde el banco estatal VTB y convertirlos en dólares.

La medida alcanza a unos 130 actores en Turquía, China, los Emiratos Árabes Unidos y la propia Rusia (Mauricio Lima/The New York Times)

En la misma Rusia, Artic LNG 2, las filiales de Gazprom Neft, el conglomerado AFK Sistema, la Universidad Técnica Estatal Batman y la empresa minera y de metales Russian Titanium Company (Rustitan) junto con los bancos Absolut, Pochta y Russian Standard, fueron sancionadas también.

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Asimismo, Estados Unidos apuntó contra la Public Legal Military Construction Company, perteneciente al Ministerio de Defensa ruso -Roskapstroy-, que participa en la reconstrucción del puerto de la ciudad de Mariupol, que quedó completamente destruido tras los feroces combates que allí se libraron en mayo de 2022.

Con esta medida, el Tesoro busca “golpear a la industria interna del país [Rusia], que trata de reinventarse para mantener su maquinaria de guerra”, así como “hacer frente a los productores, exportadores e importadores de casi todos los artículos de alta prioridad identificados por la coalición internacional en sus sanciones y controles de exportación impuestos”.

En ese sentido, la secretaria de la entidad, Janet Yellen, insistió en la importancia de continuar con estas medidas ya que -aseguró- Putin está acorralado por las prohibiciones que pesan sobre su país y, por tanto, “depende de individuos y entidades de terceros países, dispuestos a reabastecer a sus militares y perpetuar su atroz guerra contra Ucrania”.

Janet Yellen, insistió en la importancia de continuar con este tipo de medidas y aseguró que Estados Unidos no dudará en responsabilizar a estos actores (REUTERS)

“Las acciones de hoy demuestran nuestra mayor determinación por continuar perturbando cada eslabón de la cadena de suministro militar rusa y apuntar a actores externos que buscarían apoyar el esfuerzo bélico de Rusia. No dudaremos en responsabilizarlos”, concluyó.

Mientras Occidente condena a Rusia por la vía diplomática, las tropas en el campo de batalla siguen lanzando sus ofensivas y matando a decenas de inocentes cada día.

Así, este miércoles, Moscú lanzó uno de sus mayores ataques contra Ucrania en lo que va del año, en el que al menos seis personas perdieron la vida. En esta oportunidad, los misiles impactaron en cerca de 118 localidades, en diez regiones de todo el país.

“Los rusos siguen aterrorizando las ciudades y pueblos de Ucrania. Los ocupantes aumentan el número y la intensidad de los ataques. Esta noche transcurrió con inquietud en varias zonas. Se han visto afectadas instalaciones e infraestructuras críticas”, señalaron las autoridades.