Desconcierto con De Jong
El regreso del medio holandés sigue manteniendo en vilo al barcelonismo. Las sensaciones siguen sin ser buenas y ahora mismo nadie en el club se atreve a poner fecha a su vuelta.
Hay que recordar que Frenkie intentó regresar hace una semana, coincidiendo con el Clásico, pero finalmente tuvo que desistir, pese a haberse infiltrado hasta en dos ocasiones, ya que las sensaciones seguían sin ser del todo positivas. Los médicos también optaron por la cautela, conscientes que una lesión en la sindesmosis tibioperoneal distal del tobillo requiere una especial atención.
Sin embargo, esta semana el internacional holandés lo volvió a intentar, llegando a hacer parte del entrenamiento con el grupo el miércoles y el jueves. Sin embargo, una vez más las sensaciones no fueron del todo positivas, descartándose incluso esta vez la infiltración.
Con este panorama tan desolador, se presenta la próxima semana. Con dos partidos por delante -Shakthar y Alavés-, donde ahora mismo su presencia está prácticamente descartada, nos iríamos directamente a después del parón de selecciones, es decir, a finales de noviembre. Eso quiere decir que el jugador estaría descartado totalmente para viajar con su selección, por lo que Ronald Koeman aún no podrá convocarlo.
Su ausencia está siendo un duro varapalo para el grupo, que está echando de menos a Frenkie de una forma incontestable. Desde que no está en el campo -hace ya casi un mes y medio-, al equipo le cuesta sobremanera galvanizar el juego y romper líneas, dos de las grandes especialidades del holandés.
En el Barcelona más de uno cruza los dedos para que finalmente De Jong acabe saliendo del túnel más pronto que tarde. Su inminente estreno como padre podría ser también muy importante, según confían en el club, para que el centrocampista recupere la sonrisa y deje atrás todos sus fantasmas.
