Por qué las mujeres son menos felices que los hombres: 3 consejos para un mayor bienestar, según la ciencia
Ansiedad, depresión, enojo y sentimientos de soledad son los síntomas como se manifiestan el malestar femenino y la insatisfacción. Los expertos indican las causas y cómo pueden sentirse mejor y proteger su calidad de vida
El 44 por ciento de las mujeres estadounidenses están satisfechas con el trato que reciben las mujeres en la sociedad. En comparación, el 61% de los hombres estadounidenses están satisfechos con el trato que reciben las mujeres. La satisfacción de las mujeres comenzó a caer en picada entre 2016 y 2018, con el surgimiento del movimiento #MeToo y la elección de Donald Trump. Durante este tiempo, sus niveles de satisfacción cayeron 15 puntos. La última lectura para las mujeres es la más baja registrada desde que Gallup comenzó a encuestar la pregunta en 2001.
Por otro lado, un reciente artículo de la doctora Lucía Crivelli, Jefa de Neuropsicología de Fleni, publicado en la revista The Lancet Healthy Longevity, indicó que en América Latina y el Caribe, donde hay más desigualdades de género y socioeconómicas, la prevalencia de demencia es mayor, especialmente en las mujeres.
Las causas de la infelicidad
Muchas mujeres siguen siendo las principales cuidadoras de niños y parientes ancianos. La mayoría también tiene la doble carga de gestionar el hogar y la familia, además de sus responsabilidades laborales. Y dentro del lugar de trabajo tres de cada cinco mujeres han sufrido acoso sexual o abuso verbal, según un estudio.
La doctora Crivelli, señaló en una nota reciente a Infobae: “En sociedades colectivistas, donde se refuerzan representaciones sociales ligadas a la familia y a la religión, el rol de las mujeres está reservado para el cuidado de los hijos y del hogar. Este papel podría tener un efecto negativo en las mujeres debido a que reducen sus posibilidades de acceder a un mayor nivel educativo y, por consiguiente, a oportunidades laborales, que a su vez podrían conducir al aislamiento social y a un estilo de vida más sedentario”. Estos factores podrían afectar su salud física y mental.
Además, indicó en la misma nota: “El 82% de las víctimas de homicidio por parte de una pareja íntima son mujeres. La exposición a la violencia de manera crónica puede reducir la calidad de vida y facilitar la aparición de trastornos psicológicos, como la depresión, relacionados al deterioro cognitivo.”
Datos positivos
La brecha de género en el bienestar quedó notablemente documentada durante la pandemia, ya que muchas mujeres asumieron más responsabilidades domésticas y de cuidado además del trabajo. Pero también se observó que, aunque las mujeres sufrieron un mayor impacto en su bienestar, se recuperaron más rápidamente, lo que parece indicar que las mujeres son más resilientes emocionalmente que los hombres. Uno de los factores a favor que tienen las mujeres y que puede contribuir a su resiliencia es la conexión social.
En un estudio de 2019, los investigadores encontraron que las mujeres obtuvieron puntuaciones más altas que los hombres en relaciones positivas con los demás, así como en la capacidad de crecimiento personal. Piden ayuda a los seres queridos antes y, por lo tanto, tienen más probabilidades de superar la adversidad más rápidamente.
También se ha descubierto que las mujeres dan más valor a las conexiones sociales que los hombres. Los estudios han encontrado que las amistades de las mujeres son más íntimas: prefieren los encuentros cara a cara que permiten una mayor intimidad y apoyo emocional, mientras que las amistades de los hombres tienden a ser más de compartir actividades. Una vez más, esto puede explicar el efecto beneficioso de la amistad sobre la salud mental de las mujeres.
3 consejos de los expertos para ser más feliz
La relación entre la felicidad y la salud mental se vincula directamente con las condiciones de vida de cada persona: las actividades que realizan, cómo están y cómo se sienten frente a sus relaciones, el trabajo y la vida en general. Se puede considerar que cuanto más tiempo disponga una persona para el disfrute de estas situaciones y/o emociones, su estado de ánimo tenderá a ser más estable y tendrá mayores posibilidades de ser feliz.
En relación a esto, la neuróloga Macarena González (M.N 137 937), explicó a Infobae que “existen acciones como cuidar la calidad y cantidad del sueño, realizar actividad física, cuidar la alimentación, o estar en contacto con otras personas que ayudan a la salud mental. Sin embargo, en casos de trastornos de angustia o pánico, cuando este tipo de actividades ya no son suficientes, es importante que la persona consulte con un médico y nunca automedicarse, ya que el especialista es quien debe definir cuál es el tratamiento adecuado”.
Teniendo en cuenta todo esto, las mujeres necesitan dedicar mayor tiempo para proteger su bienestar. Aquí hay cuatro formas basadas en evidencia para ayudar a lograrlo:
1. Conectarse con la naturaleza
Pasar tiempo al aire libre en entornos naturales puede resultar muy reconfortante. Un estudio reciente encontró que las intervenciones basadas en la naturaleza son particularmente curativas para las mujeres que han experimentado un trauma o una enfermedad.
El doctor Ricardo Corral, médico psiquiatra (MN 67653), jefe del Departamento de Docencia e Investigación del Hospital Borda, presidente de la Asociación Argentina de Psiquiatras, opinó en una nota reciente a Infobae: “Hay dos aspectos a destacar en relación a cómo la naturaleza favorece la salud del cerebro. Uno tiene que ver con los espacios verdes, abiertos, con árboles, o también con el estar en el mar o la montaña, que generan sensación de relajación y tienden a disminuir el estrés. Esos lugares contribuyen a la introspección, reducen la ansiedad y generan tranquilidad. El segundo aspecto es más físico y biológico, y está relacionado con la pureza del aire y oxigenarse mejor”.
Por lo tanto, incluir algo de tiempo al aire libre en la naturaleza en los planes diarios o semanales, como un paseo por la playa, correr por el bosque o leer un libro en el parque, pueden ser muy beneficiosos.
2. Ponerse en movimiento
Los estudios demuestran que cuando las mujeres realizan actividad física con regularidad, aumenta la autoaceptación y el crecimiento personal. El ejercicio aeróbico es particularmente útil para la salud cognitiva a medida que las mujeres envejecen. Los ejercicios de alto impacto con pesas, como saltar y correr, mejoran la salud ósea de las mujeres de mediana edad y se ha demostrado que el ejercicio moderado regular, como caminar, mejora los síntomas de la menopausia.
3. Reducir el consumo de alcohol
Las mujeres enfrentan riesgos específicos de género relacionados con el alcohol, incluido un mayor riesgo de ser víctima de violencia y más problemas relacionados con la salud, como enfermedades cardíacas y cáncer de mama . Las mujeres también se emborrachan más rápido que los hombres, lo que puede hacerlas más vulnerables.
Dado que las mujeres tienen el doble de probabilidades que los hombres de experimentar ansiedad, reducir o eliminar el alcohol puede ser sensato. De hecho, las investigaciones muestran que dejar el alcohol puede mejorar significativamente la salud y la felicidad de las mujeres.