Modric se replanifica
El croata está en un punto complejo. La derrota contra Turquía le complica el pase a la Euro, su último gran objetivo y un punto de fricción con el Madrid...
Modric está obligado, por tanto, a redoblar esfuerzos ahora y quién sabe si en marzo. Si Croacia no logra el pase directo tendrá como tercera un playoff a cara de perro en marzo, justo cuando el Madrid estará entrando en el tramo más caliente de la temporada. Precisamente esta cuestión, sus deberes con Croacia, ha sido uno de los puntos de fricción entre el 10 y el Madrid. El club aceptó en la renovación la condición de Luka de seguir yendo a portar el brazalete de su país, pese a que la entidad blanca entiende que su papel debería ser más parecido al de Kroos, que renunció la temporada pasada a la Mannschaft. Quedarse en Valdebebas, no arriesgar su físico y ser una segunda unidad fresca de centrocampistas para los partidos posteriores al virus FIFA de los que regresan con las piernas cargadas los Tchouameni, Camavinga, Valverde y Bellingham.
Pero Modric insistió en su doble compromiso con su país y con su club pese a los 38 años que figuran en su pasaporte. La clave es ese playoff de marzo. De acceder directos a la Euro, el croata y su seleccionador, Zlatko Dalic, podrían negociar un descanso durante ese parón si Croacia sólo tiene amistosos porque ya está clasificada. Pero si son partidos a todo o nada por estar en Alemania 2024, Modric no escatimará ni una gota de sudor.
Mucho en todo ello lo orientará ese Gales-Croacia del domingo sin perder de vista a Armenia, la selección que puede ser jueza del grupo. Un equipo muy peleón que supo sorprender a domicilio a Gales (2-4) y arañarle un empate a Turquía (1-1) en feudo otomano. Con 7 puntos (aunque con un partido más), aún tienen cosas por decir. Sus dos últimos partidos serán contra Gales... y el último en Croacia. Modric, en el que puede ser su último año en el Madrid, tiene dos frentes muy abiertos: ese billete a la Euro y el seguir dando el callo en esta fortísima competencia por conseguir minutos en el centro del campo madridista.