Liverpool logra su tercera victoria en una semana para mantener la presión sobre sus rivales

JURGEN KLOPP tiene a su equipo tocando con un ritmo diferente estos días: uno que hace música dulce en lugar del rock pesado de antaño.

Ken Lawrence, The Sun

El técnico del Liverpool parecía muy satisfecho después de este viaje hacia la victoria y tenía razón en verse tan feliz después de que Diogo Jota, Darwin Núñez y, por supuesto, Mo Salah saquearan los En sólo diez partidos de liga en lo que el alemán llama Liverpool 2.0, su equipo no sólo se reconstruye sino que se recarga y, gracias especialmente al talento de Dominic Szoboszlai, juega con la creencia de que muchos en el Kop temían la temporada pasada que podría haber desaparecido. para siempre.


Fue divertido verlo, al menos para los alemanes y sus seguidores que comenzaron a creer nuevamente.

El equipo de Steve Cooper nunca tuvo realmente la oportunidad de igualar el dinamismo y garbo de un equipo que, bajo la dirección de Klopp, pasó del gegenpressing al entusiasmo.

Por otra parte, Cooper efectivamente convirtió a su equipo en blanco fácil al apostar por cinco defensas y, efectivamente, los hombres de Klopp cargaron el arma y siguieron disparando.

Una de las razones por las que el técnico del Forest decidió contenerse fue la pérdida del delantero principal Chris Wood por una lesión en el tendón de la corva que lo mantendrá fuera durante al menos seis semanas.

Sin embargo, su club no había ganado en una visita a la mitad roja de Merseyside desde 1969 y los viejos tiempos de Brian Clough.

Realmente no tenía nada que perder al menos tratando de ser descarado con las cosas, pero su táctica de tener y retener en realidad nunca iba a funcionar.



El equipo de Klopp no ​​había perdido un partido de Prem en Anfield en el año calendario desde que el Leeds United se fue con una victoria por 2-1 y nunca hubo dudas en la mente del alemán de que esa secuencia invicta no se extendería.

No de la forma en que sus jugadores se pusieron manos a la obra.

Dicho esto, por un momento pareció que podría convertirse en otro de esos días para Núñez cuando faltaba media hora.

Se levantó sin marca para encontrarse con el córner de Trent Alexander-Arnold, pero envió su cabezazo desde diez metros.

Sin embargo, el enigmático uruguayo no tuvo que preocuparse mucho.

Menos de sesenta segundos más tarde, estaba celebrando con sus compañeros de equipo en la zona de Kop cuando la resistencia del Forest comenzó a ser destrozada.

Alexis Mac Allister capturó el balón en su propio campo y se lo envió a Salah .

El pase interior del egipcio a Núñez, sustituyendo al angustiado Luis Díaz que sufría un trauma familiar tras el secuestro de sus padres , se disparó al instante.

Matt Turner llegó a ese tiro pero sólo pudo pararle directamente a Jota y no pudo fallar.

Su reacción no fue simplemente divertirse, sino correr al banquillo para coger una camiseta del equipo con el nombre de Díaz y su número 7 y blandirla en una conmovedora muestra de apoyo al colombiano.

Cuatro minutos más tarde, la ventaja se duplicó tras otro brillante contraataque.

Ese movimiento ilustró lo importante que se ha vuelto Szoboszlai, y muy rápidamente, desde su llegada de £ 60 millones procedente del RB Leipzig.

El húngaro se vio como en casa casi desde el comienzo de su nueva carrera como parte de la reestructuración del mediocampo de £150 millones de Klopp este verano que tanto ha revitalizado las cosas.

Él fue el corazón de esta actuación y subrayó que, mientras el jugador de 23 años se convertía en el nuevo conductor de los ataques de alto ritmo de su equipo, se abalanzó sobre el toque de Jota desde dentro del campo del Liverpool.

Szoboszlai se acercó al siempre listo Salah antes de devolver el balón y disparar con fuerza a través del área.

Núñez estuvo en el lugar correcto en el momento correcto y esta vez también hizo lo correcto: simplemente permitió que el balón golpeara su pie y volara hacia la red.

El portero Turner no sabía lo que le había golpeado, pero se dedicó a hacer dos buenas paradas mientras los oponentes de su equipo eran superados.

Ryan Gravenberch, el último de esos mediocampistas en ser fichado en un cambio de £ 34 millones procedente del Bayern Munich, ha demostrado que él también se está adaptando bien y había mucha confianza en el golpe que se desvió y obligó a Turner a la desesperación. .

El número 1 del Bosque realizó una parada similar para despejar el gol de Szoboszlai segundos después.



Tal fue el dominio del Liverpool que después de una hora Klopp pudo dejar que Jota y Gravenberch se pusieran en pie a favor de Harvey Elliott y Cody Gakpo.

Pero el Liverpool siguió adelante y Salah anotó el último gol en el minuto 77.

Marcó el decimocuarto partido consecutivo en Anfield en el que anotó o asistió, aunque la asistencia esta vez provino de Turner y el suplente Harry Toffollo entre ellos.

El portero y su defensor se quedaron varados cuando ambos intentaron un despeje largo de Szoboszlai.

Salah simplemente hizo mucho, corriendo para anotar su décimo gol en una campaña que promete mucho ahora que Klopp ha cambiado de tono.


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