También se dice “no” a Arabia
Sergio Ramos es el último jugador que ha preferido Europa a pesar de las jugosas fichas que ofrecen en la liga de Arabia Saudí. Pero no ha sido el único.
“Es complicado cuando jugadores que están en la mitad de sus carreras y que tienen calidad para jugar en los grandes clubes de Europa decidan optar por esos traspasos. Dicen que es un fútbol ambicioso cuando lo importante es el dinero”, se queja Toni Kroos. El futbolista del Real Madrid ha sido uno de los más críticos con la forma de crecer de la liga árabe y no entendió que una gran promesa cómo Gabri Veiga se decantara por ir allí. De hecho, es público que su agente, Volker Struth, el mismo que el de Müller o Götze, tiene la orden de los tres futbolistas de no aceptar ofertas de allí.
En la caza de talento de la Saudi Pro League, los entrenadores también han sido ‘tocados’. Incluido Jose Mourinho. El técnico portugués ha sido durante años uno de los entrenadores más deseados y Arabia (Al Hilal y Al Ahli le contactaron), cómo no, se fijó en él. “Yo he rechazado ofertas increíbles”, asegura el técnico de la Roma, que ha contado públicamente cómo primero China y este verano dos de los equipos saudíes más potentes intentaron hacerse con sus servicios. “¿Arabia Saudí? Es extraño. Entiendo el aspecto financiero, pero preferiría jugar en un gran club de Europa”, asegura otro preparador con trayectoria como Ronald Koeman. Marcelo Gallardo, el reputado exentrenador de River que ha sido colocado en varios grandes de Europa, también escuchó cantos de sirenas. Llegó a decir no a una oferta de 7,5 millones por temporada.
Mbappé, Messi, Modric...
Los tentáculos de los principales equipos saudíes han llegado hasta el nombre del momento. En el largo culebrón protagonizado por el astro francés del PSG y el interés del Real Madrid, Arabia también tuvo su protagonismo. Se filtró que el PSG barajó una oferta de 300 millones por su delantero, que podría cobrar 200 en concepto de ficha (y sin contar derechos de imagen). Finalmente, el jugador se quedará en París esta temporada, pero de haber aceptado, el golpe hubiera sido tremendo para el fútbol europeo. Tampoco se dejó llevar por las mareantes cifras Leo Messi, quien finalmente se decantó por Miami y ‘arrastró' a sus excompañeros Busquets y Jordi Alba, quienes también hubieran tenido opciones de llegar al país asiático. Luka Modric, otra estrella en la recta final de su carrera, vio con mejores ojos aceptar cada vez un rol más secundario en el Real Madrid que un multimillonario acuerdo en la península arábiga.
Lo cierto es que hay muchos nombres que aún prefieren intentar triunfar en Europa, a pesar de que las cifras colocan a la liga saudí como la segunda en gasto este verano. Muy por delante de, por ejemplo, LaLiga española, que ha caído a la sexta posición. Aún así, hay casos en España de jugadores que han rechazado la jugosas ofertas árabes. Equipos como el Betis han podido incorporar a Isco, que decidió esperar una opción española a pesar de estar sin equipo. También a Abde, otro fichaje verdiblanco que pudo marcharse por 20 millones de euros. El Atlético ha sido otro de los clubes al que han afectado la planificación.. y que aún no se confía, como el propio Diego Simeone avisa. Ni Rodrigo de Paul ni Morata se marcharon, diferente caso es el de Carrasco, que se ha marchado ya... Sergi Roberto o Kubo son otros ejemplos de futbolistas que eligieron España.
El ‘efecto Cristiano’
Sin embargo, y a falta de que se cierre el mercado saudí, aún abierto, han sido muchos los jugadores de alto nivel que han llegado a Arabia. Y eso ha provocado un efecto llamada debido a que las razones extradeportivas que pueden frenar a otros futbolistas se están disipando ante el ‘teórico aperturismo’ que se encuentran los recién llegados. El fútbol es ahora mismo la imagen del país en el mundo y su forma de mostrarse al mundo como un país en modernización. Está por ver si este éxodo es tan multitudinario en otras ventanas de mercado, aunque hay jugadores a los que aún no le convence. “El nivel está subiendo, pero el fútbol más competitivo sigue estando en Europa”, sentencia Ruben Dias, central del Manchester City. La Champions sigue siendo la joya de este deporte (y negocio), y aún parece muy improbable que acepte clubes de competiciones fuera de UEFA.
Aún así, el factor económico, ese ‘aperturismo’ social y la subida de nivel de la competición son los principales atractivos de esta Saudi Pro League, aunque nada de este boom se entendería sin el ya conocido como ‘efecto Cristiano’. Que nombres como Mbappé o Messi hayan tenido siquiera la opción de llegar a Arabia tiene una explicación en el impacto que produjo el desembarco del portugués en una liga entonces semidesconocida. Que aceptara aquella oferta estratosférica pronto le convirtió en la imagen del nuevo fútbol del país. “Después de mí, ahora todos quieren venir”, ha llegado a sacar pecho, aunque el propio CR7, meses antes, llegó a rechazar la posibilidad árabe. Finalmente le convencieron. Arabia aspira a que en el futuro, todas sus ofertas sean irrechazables.
