“Sommer fue arrastrado por una avalancha de barro”

Murat Yakin, seleccionador de Suiza, ataca al Bayern en una entrevista en ‘Sport1′ por su comportamiento con Sommer durante su breve etapa en el Allianz Arena.

Pablo M. Fuentenebro

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La situación de la portería del Bayern fue cuestión de estado durante todo 2023. No sólo en Alemania. La baja de larga duración de Neuer por lesionarse al irse a esquiar provocó que el Bayern fichara a Yann Sommer del M’Gladbach. Ocho meses después, el portero suizo hacía la maletas para irse al Inter de Milan. Una salida casi pactada por Sommer que no aguantaba más en la portería bávara.

Ahora su seleccionador en Suiza, Murat Yakin, da detalles de la media temporada de infierno que pasó Sommer en el Bayern. Lo hace en una interesante entrevista en el medio Sport1. “Conozco muy bien a Yann, lo tuve conmigo en Basilea. Su paso por el Bayern no le salió ileso. Necesita una confianza básica para poder rendir al 100 por ciento. Yann fue arrastrado por una avalancha de barro. Él no se merecía eso. Se convirtió en víctima de un mecanismo que sólo ocurre en el Bayern. Cuando vino a la selección, por supuesto que hablé con él. Ese no era el Yann como lo conozco. En el Bayern estuvo bajo una presión extrema, que finalmente resistió. Pero eso también demostró que es un portero fuerte. Y lo logramos a través de nuestro entrenador de porteros”.

Y añadió: “Lo del Bayern no rebotó sólo en Yann. Sintió el apoyo desde el punto de vista deportivo, pero faltaba algo. No lo dejó sin rastro. Todas las críticas realmente le pasaron factura. No entendí estos. Conocían a Yann y sabían a quién acudir. Ha demostrado lo que puede hacer. Y él nunca se quejó. La etapa en el Bayern no fue fácil para Yann, tuvo que luchar con eso”, deslizando que quizá no valoraban del todo al portero suizo.

Yakin admite, en la entrevista, que tuvo ofertas para entrenar en Arabia Saudí (Al Hilal y el Al Ahly) pero lo descartó: “No se trataba de dinero para mí. Puedo imaginarlo todo en el fútbol y, por supuesto, el factor económico siempre juega un papel importante. Pero en ese momento no me sentí bien. Este año ya había jugado cuatro partidos como seleccionador nacional y no quería irme inmediatamente. En un momento como este, no me interesa ninguna otra oferta, por muy lucrativa que sea. Así que decidí no hacerlo. Estoy feliz con lo que estoy haciendo ahora. ¿Haber entrenado a Neymar? Eso ciertamente habría tenido su atractivo, pero Neymar ya no es tan interesante. Tengo a mis jugadores en la selección nacional. Neymar es un gran futbolista y disfrutas viendo lo que hace en el campo. Pero no necesariamente tengo que entrenarlo”.