La actriz desempeña un osado papel en una película agridulce que triunfa en HBO Max
Infobae
Las
comedias sobre iniciación sexual han sido prácticamente un género desde
hace décadas. Una vez caída la censura del cine clásico, los
realizadores se atrevieron a tratar este tema con diferentes tonos, pero
la premisa tuvo su mayor éxito cuando predominaba el humor. Hazme el favor (No Hard Feelings, 2023), escrita y dirigida por Gene Stupnitsky, es una nueva variante de esta clase de comedias sexuales. Maddie (Jennifer Lawrence)
es una joven de más de treinta años que lleva una vida sexual libre y
sin compromisos. Vive en un pueblo que subsiste gracias a la temporada
turística, pero su economía está cada vez peor. A punto de perder la
casa de su familia, la mujer descubre un insólito aviso: dos padres
ricos y sobreprotectores buscan a alguien que tenga una cita con su hijo
antes de que entre en la facultad. Siente que es la manera adecuada de
que rompa el cascarón y tenga algo de vida social antes de ser
universitario.
Maddie deberá seducir entonces al introvertido Percy (Andrew Barth Feldman)
a fin de obtener a cambio un auto que le permitirá equilibrar sus
cuentas. La única condición es que Percy no sepa la verdad y crea que
Maddie se acerca él genuinamente. La diferencia de edad es grande, pero
no se trata de que sean pareja, sólo que tengan un encuentro que
despierte al muchacho antes de que su salida al mundo real lo encuentre
sin experiencia.
"Hazme el favor" ya está disponible para streaming luego de haberse estrenado en cines el 23 de junio (Créditos: HBO Max) La
película es una comedia sexual bastante osada, con un humor que va del
trazo grueso a la libertad sexual sin problemas. Pero todos sabemos lo
que pasará: Maddie descubrirá que Percy es en realidad un joven
brillante, lleno de inquietudes y valor, subestimado por sus padres
controladores. El largometraje deja, poco a poco, un espacio para algo
con más sentimientos, e incluso algo de melancolía. El cambio de tono
podrá desencantar a los que buscan risas fáciles, pero es una buena
forma de mostrar sofisticación y un enorme corazón, incluso en lo
vinculado con lo sexual. El humor de la ficción encuentra a Jennifer
Lawrence desprejuiciada, capaz de reírse de sí misma y poniéndose en
ridículo sin problemas.
Una
propuesta más original de lo que se puede imaginar y la actualización
de una fórmula que siempre ha atraído a los espectadores. Gracias a la
actriz de Los juegos del hambre, la historia tiene una vuelta de
tuerca y la idea de la mujer libre le suma mucho más a el largometraje.
El protagonista masculino
también es muy carismático y la química entre
ambos funciona perfectamente. Una sorpresa más compleja de lo que muchos
pueden creer.
La comedia tiene una propuesta controversial por la diferencia de edad de los protagonistas. (Créditos: HBO Max)