El Manchester United fue abucheado después de que Andersen del Crystal Palace anotara
Erik ten Hag tendrá que descartar la palabra de moda que citó el entrenador del Manchester United en este partido. El “momentum” ahora está destruido después de una derrota que pone fin a una racha de victorias a dos, mientras que, una vez más, sus hombres deben reagruparse, esta vez para la visita del Galatasaray el martes en la Liga de Campeones.
El United ha perdido cuatro de sus siete primeros partidos de liga. Esto ocurrió por última vez en 1989-90, la temporada en la que la infame pancarta “Ta Ra Fergie” fue levantada en un partido en diciembre para exigir el despido de Alex Ferguson. El escocés no, por supuesto, pero Ten Hag sabrá que tiene que frenar las pérdidas en serie o su trabajo estará en peligro; su equipo ha marcado apenas siete goles y tiene una diferencia de goles de menos cuatro.
Al cierre hubo abucheos. “Entiendo”, dijo el holandés. “Jugamos en casa y jugamos contra Crystal Palace , al que tenemos que vencer, con todo respeto. Sé que cada partido de la Premier League es difícil, tienes que jugar lo mejor que puedas y entiendo que los aficionados esperan lo mejor de sí”.
El viernes el técnico nombró a Alejandro Garnacho como un jugador que no estuvo en el equipo por no rendir. Sin embargo, el United se convirtió de repente en una propuesta eléctrica cuando el extremo con botas de cohete entró en el segundo tiempo. En un momento diabólico, Garnacho engañó al Crystal Palace a lo largo de su línea derecha, su centro rebotó en dos defensores mientras el balón amenazaba con ir a cualquier parte, incluso más allá de Sam Johnstone para el empate.
Pero no. El gol de Joachim Andersen en la primera mitad permitió al Palace vengarse de la derrota del martes por 3-0 en la Copa Carabao a pesar de que el United dominó la fase final; En el tiempo añadido, el suplente Donny van de Beek cabeceó el balón a Garnacho, cuyo disparo fue detenido por un impresionante Johnstone desde muy cerca.
Garnacho reemplazó por la izquierda a un tibio Marcus Rashford, que fue sustituido por Christian Eriksen poco después de la presentación del joven. Rashford solo tiene un gol esta temporada y Ten Hag aceptó que está fallando.
“Él sabe que puede hacerlo mejor y estoy seguro de que lo logrará”, afirmó el directivo. "Él trabaja duro. Él anotará y llegará, pero no será automático. El equipo tiene que invertir mucho en él. Hoy la toma de decisiones no fue lo suficientemente buena”.
Ten Hag también admitió que tiene que trabajar para evitar que esta sea una campaña larga en la que se debe dar un paso adelante y luego dos atrás. "Por supuesto que esa es la preocupación y tenemos que ser más consistentes", dijo. “La exigencia es que consigamos una serie de victorias y tenemos que hacerlo mejor que ahora. Puedo darte razones pero lo explicarás como una excusa y no hay excusas: necesitamos ganar”.
Cuando se le preguntó si el United es un poco blando ante su propia afición, Ten Hag objetó, pero por poco. "Hemos perdido dos partidos seguidos aquí en la Premier League , pero no sacaré esa conclusión ahora", dijo. "Tenemos que hacerlo mejor, ese es definitivamente el caso, y tenemos que demostrar con nuestro lenguaje corporal que Old Trafford es una fortaleza y que aquí no se puede conseguir nada y que lo único que se puede conseguir es salir de aquí". pérdida."
Para Roy Hodgson, la victoria fue excelente y lo convierte en el primer entrenador en la historia de la Premier League en permanecer invicto aquí en cinco partidos consecutivos: cuatro con Palace y uno con Watford. “Estoy feliz por eso”, dijo. “Lo que más me alegra es la forma en que jugó el equipo y estoy muy contento por los jugadores. No es fácil venir aquí por segunda vez en unos días y ofrecer ese rendimiento y trabajar tan duro durante 90 minutos. No estoy seguro de poder contarles sobre los otros juegos antes, aunque estoy bastante seguro de que también me hubiera encantado conocerlos”.
La concesión del United se produjo a través de una defensa autodestructiva. Eberechi Eze falló un tiro libre desde la derecha y los de rojo permitieron que el balón llegara hasta Andersen, siendo Rasmus Højlund el principal culpable de fallar un cabezazo. Andersen remató dulceme
