El
uruguayo se exhibe en el triunfo de su selección ante Chile, logrando
un gol y desplegando las virtudes que le convirtieron en el ‘Halcón’.
Agustín Martín
As
Poco a poco, sin prisa pero sin pausa, Fede Valverde (25 años) va regresando a los niveles con los que sorprendió al comienzo de la pasada temporada.
El centrocampista, que lució el brazalete de capitán de la Celeste ante
Chile en su Montevideo natal (ya lo había hecho en un encuentro
amistoso anterior ante Japón en Tokio el pasado mes de marzo), fue
elegido por sus compañeros (así lo explicó Marcelo Bielsa, que se
estrenaba como seleccionador uruguayo) para liderar a los charrúas, y el madridista no defraudó.
Fue uno de los mejores jugadores sobre el terreno de juego y encarriló
el triunfo local sobre los chilenos al anotar en segundo tanto casi al
borde del descanso con un derechazo seco y potente desde fuera del área.
La puntilla para La Roja.
Eso espera Ancelotti para el Real Madrid. Un
Valverde avasallador, con potencia para superar líneas rivales como ha
venido haciendo, pero que se quebró la pasada temporada. Una campaña en la que Valverde dejó atrás el apelativo de Pajarito para adoptar el de Halcón con
su juego directo y efectivo. Hasta antes del Mundial de Qatar, Valverde
había marcado ocho goles en sus 20 primeros partidos (entre Liga y
Champions). Su despliegue llevó a Ancelotti a desvelar una apuesta con
el chaval: “Le dije a Valverde que si no marcaba más de diez goles,
rompía mi carnet de entrenador”. En la final del Mundial de Clubes, el
uruguayo salvó a su entrenador.
Sin embargo, hubo dos Valverdes la pasada campaña.
El primero, imponente en el centro del campo, bien jugando por la banda
derecha, bien jugando como interior, ayudando a Kroos cuando este
ejercía de pivote. Pero tras el Mundial, el uruguayo dio un bajonazo
inesperado. Los motivos fueron una fascitis plantar que le lastró la
segunda parte de la temporada y un problema de índole personal que
afortunadamente fue resuelto con éxito. Un incidente con Baena,
jugador del Villarreal tampoco le ayudó. En esa segunda parte de la
campaña apenas marcó cuatro tantos, siendo sólo uno de ellos en Liga,
ante Osasuna (los otros tres fueron en el Mundial de Clubes, incluyendo
dos en la final).
Pero una vez superada esa inoportuna lesión y liberado en mente, Valverde ha vuelto a alzar el vuelo.
Esta temporada volvió a dejar sensaciones de su regreso con dos golazos
parecidos al logrado ante Chile en un amistoso de pretemporada contra
el Milan (3-2). Sirvieron para nivelar un encuentro que se había puesto
cuesta arriba en la primera mitad. Para Ancelotti, Valverde sigue
siendo pieza clave en este comienzo de curso: ha sido titular en los
tres primeros partidos de Liga, dejando en el banquillo a jugadores como
Kroos y Modric. El Halcón ha iniciado el vuelo de regreso a un lugar que nunca tuvo que haber abandonado....