Cayó en Bolivia “Tío Arantes”, un ex líder de una organización criminal de Brasil que había escapado de prisión

José Claudio Arantes fue detenido en la región de Santa Cruz durante una serie de operativos rutinarios. Era buscado en su país por delitos de “asociación criminal” y narcotráfico

El brasileño se identificó inicialmente como Raildo Teixeira da Silva, aunque el documento de identidad que presentó era falso, por lo que los agentes de la Fuerza Especial de Lucha contra el Crimen (Felcc) decidieron arrestarlo.

En el momento del arresto policial, esta persona se torna violenta e intenta destruir un aparato telefónico que se encontraba en su poder. Esto llama mucho más aun la atención de los efectivos policiales”, señaló Holguín.

Una vez en las oficinas de la Policía, se verificó su verdadera identidad y también se obtuvieron algunos antecedentes que el hombre tiene en su país.

“Tío Arantes” fue detenido en Bolivia (El Deber)
“Tío Arantes” fue detenido en Bolivia (El Deber)

Según Holguín, Arantes estaba prófugo tras haber huido en noviembre de 2021 de la prisión de Gameleira, en la ciudad de Campo Grande, capital del estado brasileño de Mato Grosso.

Además “ya cuenta con una resolución por parte de Migración para ser trasladado hasta la frontera, expulsado del territorio nacional y entregado a las autoridades policiales de Brasil”, agregó.

Según versiones de medios brasileños, Arantes era miembro del Primer Comando de la Capital (PCC), la mayor organización criminal de Brasil, si bien Holguín señaló que por ahora no tienen esa información.

Otro brasileño que también estaba buscado con “notificación con sello rojo” fue entregado en esta jornada a la Policía Federal de Brasil por el ministro boliviano de Gobierno (Interior), Eduardo del Castillo.

El hombre, identificado como Marcos Antonio da Silva y que también usaba el nombre falso de Makson Silva Do Santos “es descrito como un criminal de alta peligrosidad”, señaló Del Castillo en sus redes sociales.

El ministro informó, además, sobre una reunión que sostuvo en la región amazónica de Pando, fronteriza con Brasil, con autoridades de ese país “para tocar temas de seguridad y lucha contra el delito transnacional”.

Bolivia y Brasil comparten una frontera de cerca de 3.500 kilómetros.


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