Ucrania anuncia un “súperavance” por la paz
El líder ucraniano, Zelenski afronta este mes de agosto en Arabia Saudí la segunda de las tres fases previas a la presentación de la Fórmula de Paz que dio a conocer el pasado mes de noviembre. La entrada de China en la negociación, un gran paso.
Y es en este escenario en el que podría hacerse valer la propuesta de paz del presidente ucraniano, Volodimir Zelenski. Según avanzó a finales del mes pasado The Wall Street Journal, Arabia Saudí tenía previsto reunir en una mesa de diálogo a Kiev junto con ciertos aliados occidentales y otras potencias en desarrollo del resto del mundo, como Brasil y la India. Quien no estará será Rusia. La exclusiva se ha convertido en realidad esta misma semana: Ucrania ha confirmado el inicio de estas citas, fijadas este mismo fin de semana en la ciudad de Yeda. El plan de paz de Zelenski ha activado una cuenta atrás.
El papel de Arabia Saudí como mediador
Según el rotativo norteamericano, en dichas reuniones participarán altos responsables de hasta 30 países. La elección de la urbe árabe tampoco sería coincidencia: muchos diplomáticos apuntan que esto podría favorecer una posible participación de China, cercana al régimen de Riad.
También mantiene buenas relaciones Arabia Saudí con Kiev, escenificada en la cumbre de la Liga Árabe el pasado mes de mayo, a la que fue invitado el líder ucraniano y donde se reunió con el príncipe heredero y primer ministro saudí, Mohamed bin Salmánen. Entonces ya se puso sobre la mesa “solucionar la crisis políticamente”.
Se abre el telón geopolítico en este escenario. Tal y como apunta el diario estadounidense, los diálogos de Yeda pueden servir de base para unas negociaciones entre Kiev y Moscú. Y no lo niegan en Kiev. Este miércoles, durante un discurso, Zelenski ha aclarado que la cita en Arabia Saudí no es sino la segunda fase de un plan de tres en el que incurre la Fórmula de Paz de Ucrania.
La hoja de ruta: cómo trazar una paz mundial
La primera habría sido a finales de junio en Copenhague (Dinamarca), donde también se reunieron varias de las potencias que se sentarán este fin de semana. Y la tercera llegaría en otoño, en una Cumbre Mundial por la Paz que contará con “representantes del Norte y del Sur, del Este y del Oeste”. Precisamente será este periodo, “el tiempo entre septiembre y diciembre”, el que considera Zelenski primordial para consolidar la propuesta ucraniana como la única vía posible.
A fin de cuentas, el plan ucraniano puede resumirse en convencer a los actores internacionales de una ‘paz justa’, que sirva de base y que respete “opiniones y posiciones que no contradigan la Carta de la ONU”. Cumplidas las tres fases llegará el momento de plasmar la propuesta de diez puntos que ya se hizo pública el pasado mes de noviembre en la cumbre del G-20. Los diez indispensables son:
- Radiación y seguridad nuclear.
- Seguridad alimentaria.
- Seguridad energética.
- Liberar a todos los prisioneros y deportados.
- Restaurar la integridad territorial de Ucrania.
- Retirada de las tropas rusas y reconocimiento de fronteras.
- Justicia.
- Prevención del ecocidio.
- Prevención de la escalada del conflicto.
- Confirmación del fin de la guerra.
Desde el Kremlin aseguran que seguirán muy de cerca qué se habla y se susurra en Yeda. “Cualquier intento de contribuir a un arreglo pacífico merece una valoración positiva”, ha dicho en un primer momento el portavoz de la presidencia rusa; a lo que ha continuado una cautela fría rusa, que es la que inmoviliza la guerra a base de balas perdidas en el Donbás: “el régimen de Kiev no quiere y no puede ver la paz mientras es utilizado como una herramienta de guerra de Occidente”.
El “superavance” de la entrada de China
“Queremos que China participe en la cumbre de la Fórmula de Paz. La noticia de que China vaya a mandar [al enviado para asuntos euroasiáticos] Li Hui a Yeda es un súper avance”, dijo Kuleba, ministro de relaciones exteriores, a Interfax. El ministro indicó que el príncipe heredero saudí, Mohammed bin Salman, ha desempeñado un papel importante en este sentido. “Arabia Saudí ha atraído a China, y esto es una victoria histórica”, señaló.
