MUNDIAL | EDICIÓN 2023 | GRUPOS | 1ª JORNADA / Willy, desde el primer día
El pívot, confirmando el rol de líder de la Selección en el Mundial que tiene asignado, trituró a Costa de Marfil en el segundo cuarto y metió 22 puntos en 22 minutos. España ganó 94-64.
La primera curiosidad de cualquier gran campeonato no presentó sorpresas. Núñez, Abrines, Parra y los Hernangómez formaron el quinteto del debut. Con Rudy y Llull reservados a la segunda unidad y a momentos calientes que vendrán más adelante en el campeonato, es posible que el cinco se mantenga en el tiempo. Juancho, que ha llegado a Indonesia con un grado de confianza muy superior al que tenía en Tblisi hace un año en el inicio del Eurobasket (terminó con 11 puntos, cuatro rebotes y cuatro asistencias), guio a España en un principio de partido impecable de la Selección (9-0). Para hacer camino. Para el minuto ocho de juego, Scariolo ya había puesto diez jugadores en cancha. Alberto, Llull, Rudy, Aldama y Garuba fueron los integrantes del segundo quinteto. ‘Los Elefantes’ de Dejan Prokic, con Lavodrama de gurú, intentaron poner en práctica todo lo trabajado durante 50 larguísimos días de concentración que empezaron en la bahía de Baiona y siguieron en Bosnia con hasta nueve amistosos de prueba. Al final del primer cuarto, 24-17.
El segundo trajo la aparición de Brizuela (Llull se desplazó a la posición de base). Darío tiene un aficionado muy especial estos días en la grada del Indonesia Arena: su hijo Bruno, con apenas siete meses. Brizuela pidió antes del partido tensión y continuidad en el juego para que Costa de Marfil no entrase en racha y en eso trabajó la Selección. Pero ‘Los Elefantes’ estaban respondones y aprovecharon un par de pérdidas de la campeona para estrechar la diferencia (30-26). Scariolo echó de menos intensidad y, para eso, nadie como Claver, que entró en la pista para intentar hacer algo más sólida a la Selección. El atasco se acabó en cuanto entró en acción Willy, que con una secuencia espectacular de canastas lanzó a España antes del descanso. El nuevo jugador del Barça necesita alimento, asistencias. Algo de eso había faltado en la preparación. Pero si le dan de comer, él anota. Sus compañeros le encontraron por todas partes y él hizo la brecha en el partido. Al descanso, 20 puntos del mayor de los Hernangómez y 53-34 favorable a la Selección.
España, más agresiva en defensa, ya había puesto la velocidad de crucero en el banquillo y empezó a disparar la diferencia. A Costa de Marfil se le hizo imposible seguir el ritmo de la Selección, que en el tercer cuarto sólo sufrió un contratiempo. Abrines tuvo que aplicarse hielo en la rodilla izquierda después de un lance del juego y ya se quedó en el banquillo. El partido se convirtió entonces en un correcalles que casi ni sirvió de banco de pruebas para la Selección. Scariolo administró los tiempos de cada jugador mirando a lo que viene, pero también se permitió el lujo de pedir un tiempo muerto en el minuto 37 del partido con 82-62 para recordarles a sus jugadores que ya están metidos en el torneo y que quiere ver fuego en los ojos de todos porque lo que viene, Brasil, ya es serio. Sus jugadores le hicieron caso porque en tres minutos llevaron la diferencia final al 94-64. También en la lejana Yakarta, Scariolo no pasa detalle por alto.