La lista de la selección argentina: la estrategia de Lionel Scaloni para pensar más allá de lo inmediato
El entrenador tiene como objetivo más próximo las Eliminatorias Sudamericanas; el plan para evitar la fuga de talentos y la prioridad de “cuidar el status”
Scaloni está enfocado en el primer partido oficial del equipo como campeón del mundo. Manifestó en más de una oportunidad que la idea es sostener lo realizado y cuidar el estatus. Es por eso que la lista siempre se conforma con los futbolistas que alcanzaron la gloria en Qatar. “Entendemos que los jugadores que son citados no tienen que sentir que son dueños de un puesto en la selección. El jugador que viene debe sentir que aporta su granito de arena y que no estará para siempre”, dijo el entrenador.
Y agregó: “A nivel de juveniles, estamos de acuerdo con que de una vez por todas, esos chicos tienen que entrenarse de la mejor manera para jugar en la mayor. En la selección hay un montón de jugadores Sub 20 que estaban con Mascherano [Javier]. Todos tienen que creer que van a jugar con esta camiseta en el futuro”, es la frase de Scaloni con la que marcó su primera conferencia de prensa en el regreso a la actividad de la selección en el predio de la AFA en Ezeiza.
Entonces, esta lista que se armó para la doble fecha de eliminatorias, el jueves próximo en el Monumental, y el 12 del actual, en La Paz, ante Bolivia, se conformó justamente respetando cada una de las palabras que Scaloni pronunció en marzo de 2023. Primero porque mantiene la estructura, pero sostiene la evolución de jugadores como Facundo Buonanotte, el volante que juega en Brighton, así como también potencia el roce del arquero Walter Benítez, de PSV Eindhoven.
Y la búsqueda en este caso es todavía más profunda. Porque Scaloni sabe que debe trabajar en conjunto con Javier Mascherano, el seleccionador del Sub 23 y que tiene por delante el Preolímpico de Venezuela, en enero de 2024, para buscar una de las dos plazas que otorga el torneo para los Juegos Olímpicos de París 2024. Entonces, contemplando que los clubes no están obligados a ceder a sus jugadores porque el preolímpico no es una competencia oficial de FIFA, Scaloni convocó a algunos juveniles para que se entrenen con el equipo mayor y que el cuerpo técnico de Mascherano los siga de cerca. “Hay una buena fecha FIFA para los chicos que van a jugar el Preolímpico. Así que intentaremos hacer una lista conjunta por llamarlo de alguna manera, para que también Mascherano pueda disfrutar de esos jugadores”, contó Scaloni hace una par de semanas cuando estuvo en los Estados Unidos y fue a ver un partido del Inter Miami de Lionel Messi.
Son cuatro los jugadores que están en la lista de Scaloni que podrán trabajar por primera vez con el seleccionado mayor, podrán conocer la dinámica del grupo y que estarán bajo la lupa de Mascherano: el delantero de Fiorentina, Lucas Beltrán (22 años), el atacante de FC Dallas, Alan Velasco (21), el mediocampista Bruno Zapelli (21) y el defensor Lucas Esquivel (21), ambos de Atlético Paranaense, de Brasil.
En este escenario también hay una intención clara de Scaloni de “blindar” a uno de los futbolistas citados: Zapelli. Es que el volante que surgió de Belgrano y fue transferido en julio de este año a Atlético Paranaense por más de 4 millones de dólares, corría peligro de ser captado por la selección de Italia. Zapelli fue una de las figuras en la campaña de 2021 en la que Belgrano volvió a la primera división y en marzo de este año jugó 59 minutos en un amistoso entre la selección italiana Sub 21 y la de Serbia.
“Me preguntaron qué quería y les dije que me gustaría estar para ver la experiencia (en Italia). Pero yo sueño con jugar con los futbolistas de Argentina”, contó Zapelli. Atentos a esta situación, primero Mascherano tuvo una charla con el volante cordobés, lo convenció de ser parte del equipo que disputará el Preolímpico y después del sí del juvenil, entró en escena Scaloni. El seleccionador argentino quería evitar que Zapelli entre en alguna convocatoria de la selección mayor de Italia y que le den minutos. Es que si eso sucedía debía esperar tres años para poder convocarlo y que sea parte del proceso en la Argentina.
Un caso similar de lo que sucedió con Alejandro Garnacho, que después de haber formado parte de las selecciones juveniles de España y de declarar el jugador que quería ser parte del equipo argentino campeón del mundo, se inició el operativo para sumarlo a las convocatoria, darle minutos y con sólo jugar un partido más con el equipo mayor queda bloqueado para que España lo quiera volver a tentar.
Scaloni además, entendió que la convocatoria de Beltrán, de Velasco y de Esquivel, el chico que salió de Unión y también fue transferido al fútbol de Brasil por 2.000.000 de dólares por el 90% del pase, no sólo sirve para que los siga Mascherano, sino que son tres futbolistas interesantes para seguir, que les servirá conocer el universo selección mayor y compartir espacios con Lionel Messi y compañía.
No quiere arriesgar a nadie, porque el camino de esta última parte de 2023 es largo. En la agenda todavía tiene compromisos ante Paraguay, en Argentina, y Perú, en Lima (el 12 y el 17 de octubre) y el cierre del año será ante Uruguay, en el Monumental, y Brasil, en Río de Janeiro (el 16 y el 21 de noviembre), por lo tanto, algunas ausencias de la base de los campeones del mundo resultan lógicas. Una de las bajas para estos duelos es la de Marcos Acuña, que sufrió una dolencia muscular en Sevilla. Tampoco estará Paulo Dybala, que presentó problemas musculares durante los últimos días en la Roma. De la misma manera que Gerónimo Rulli quedó afuera por una lesión en el hombro que lo obligó a pasar por una cirugía.
Tampoco figuran dos habituales convocados por el DT: Joaquín Correa (acaba de firmar su traspaso a Olympique Marsella, de Francia) y Giovani Lo Celso (arrastra una molestia física). Y tampoco están en esta convocatoria Lucas Ocampos, Gio Simeone, Facundo Medina, Nehuén Pérez y Emiliano Buendía (lesionado). Pero claro, Scaloni fue muy claro: “Reconstruirse significa que los jugadores no se sientan dueños de la selección”.
Entonces, cada uno de los movimientos de Scaloni resultan lógicos, puede mantener conectado a jugadores como Marcos Senesi, potenciar el desarrollo de Alejandro Garnacho, mantener la mística de los campeones del mundo, blindar talentos cuando quedan bajo su radar, potenciar el trabajo de los juveniles... Todo con un sólo objetivo, cuidar la corona, esa que costó 36 años recuperar.