Fran García: el ‘3′ tiene dueño
El castellanomanchego dejó buenas sensaciones en su debut en Liga con el Madrid y presenta su candidatura para ser el lateral izquierdo titular del equipo.
Ante el Athletic fue de los más activos del equipo, no se escondió. Prueba de ello es que ningún jugador tocó más veces el balón que él a lo largo del partido. Lo hizo hasta en 99 ocasiones. Salió eléctrico y con muchas ganas de demostrar. Seguramente, demasiadas. Fruto de los nervios propios del debut y de ese afán por llegar a todo, cometió en la primera mitad algún que otro error al que no acostumbra. Fallos que de ningún modo emborronaron su gran actuación.
El de Bolaños de Calatrava (Ciudad Real) derrochó entrega, y cumplió con creces en lo que antaño era su punto débil: el aspecto defensivo. Sin demasiadas complicaciones, frenó en la primera parte al menor de los Williams y en la segunda, al mayor. Nico acabó desesperado. Lo intentó, pero Fran se encargó de que no explotase sus virtudes durante el tiempo en que estuvo en el campo (Ernesto Valverde le sustituyó al descanso por problemas físicos). Con la concentración que le caracteriza, supo temporizar y contribuyó a mitigar toda acción de peligro que llegó por su banda en el primer tiempo.
A la vuelta de vestuarios, su hermano Iñaki corrió la misma suerte. Atento al quite y siempre oportuno en los balones divididos, Fran no tuvo problemas para contenerle y acabó el partido como el jugador con más tackles (cortes yendo al suelo) realizados: 6. En lo ofensivo, cuando el equipo se estiraba, él aprovechaba para ofrecer alternativas al espacio. La nueva posición de Vinicius, más interior, le da la posibilidad de galopar por el carril izquierdo (la forma en que brilló durante su periplo de tres años en el Rayo), y así lo hizo este sábado. Sobre todo, en los primeros 45 minutos. En los segundos, mostró una mayor contención, dado el resultado.
El defensor con más minutos del verano
Su arranque de curso ha estado a la altura de su pretemporada. Fue de los que más sorprendió en el inicio de la preparación en Valdebebas por su sobresaliente condición física (en el cuerpo técnico están encantados con su profesionalidad y compromiso), y en Estados Unidos dio sentido a ese músculo con fútbol. Convenció más que Mendy hasta la lesión del francés y, tras ella, puso fin a la gira como el defensor con más minutos (214′) de la plantilla y el sexto en el escalafón global.
Ha entrado con el pie derecho y cuenta, además, con el favor de la afición, a la que ilusiona especialmente ver a un canterano de vuelta. Lo que hoy tiene, no obstante, se lo ha ganado a base de insistencia (jugó dos años en el Castilla y tres en el Rayo, hasta llegar al primer equipo blanco) y mentalidad. “Vengo para ser un jugador grande, importante”, dijo el día de su presentación. Pues de momento no ha fallado a su palabra. El 3 es suyo.