Ferrari se rinde a la evidencia
La escudería deja entrever el cambio de concepto en 2024. “El túnel de viento ya está dedicado al cien por cien en el año que viene”, dice Cardile, su jefe técnico.
“Al desarrollar el coche de este año nos dimos cuenta de que algunas decisiones no fueron correctas y comprometían el desarrollo. El coche del año que viene no será una evolución sino un coche completamente nuevo. Un chasis diferente para permitir al coche desarrollarse mejor y cumplir con los objetivos. Hemos seguido desarrollando el SF-23 para entender de dónde venían las debilidades y llegarán algunas piezas más, pero desde el parón de verano el túnel de viento está dedicado al cien por cien al coche del año que viene”, explicó Cardile en la rueda de prensa de la FIA. Unas horas antes, La Gazzetta informaba en Italia sobre el viraje hacia la filosofía Red Bull que preparan en Maranello.
No han faltado evoluciones, por tanto. “Este año hemos traído muchas cosas, dimos la vuelta al coche en España, llevamos un suelo nuevo en Miami antes, otro suelo completamente diferente en Reino Unido. Esa fue nuestra situación, empujamos más que el año pasado en cuanto a evoluciones”, resume el ingeniero italiano. Marchan cuartos en el campeonato de constructores a 14 puntos del tercero, Aston Martin.
“Seguimos lejos de los coches azules”
Sainz, séptimo en el Mundial de pilotos y aún sin podios en 2023 (Leclerc apenas ha sumado dos), destacaba al llegar a Holanda la dificultad para comprender o anticipar el comportamiento del Ferrari en función del circuito, y la dificultad para conocer el origen de algunos problemas. Cardile afirma: “Este coche tiene cambios de comportamiento en función del circuito. Tuvimos dificultades en Hungría y en Bélgica la competitividad regresó”. Aunque con humor corrige a Carlos: “Para nosotros está bastante claro lo que hicimos mal con el coche. No es cuestión de entender lo que hay que hacer. Es cuestión de hacer un buen producto que cumpla con nuestros objetivos”.
“Tenemos suerte porque los comentarios de los pilotos siempre han estado alineados con el simulador y la pista, y con los datos que recogemos. Podemos ver de dónde vienen las quejas. Desarrollamos el coche, pero el ritmo no es satisfactorio, seguimos lejos de los coches azules”, cierra, en referencia a Red Bull. A partir de 2024 puede que se parezcan más a sus rivales. Al menos, físicamente.