Crece el optimismo por Mbappé en París
El PSG ha acercado posturas con el delantero y no se descarta que renueve. Este sábado estuvo en el palco sonriente.
Este sábado, en el primer partido de la temporada, el PSG no pudo pasar del empate contra el Lorient. El debut de Luis Enrique no fue plácido, pero hubo un espectador de lujo en el palco, Kylian Mbappé. El internacional francés se sentó junto a su amigo Ousmane Dembélé, recién fichado por los parisinos y al que felicitó en redes sociales por la mañana del sábado. El de Bondy, sonriente, estuvo muy cómodo, especulando incluso la prensa francesa de que podía ser una señal de apaciguamiento contra el club.Aunque nada está firmado, ha habido acercamientos en los últimos días entre ambas partes, tal y como confirman a AS fuentes cercanas de Qatar. El pesimismo imperante en la capital francesa se ha transformado en optimismo, aunque sin cantar victoria. Mbappé quiere cumplir el último año de contrato que le resta con el PSG y en ningún momento, tal y como ha confirmado a lo largo del verano, va a declarar públicamente que quiere irse.
Misma postura
El PSG se mantiene en su postura de venderle o renovarle, pero también ha querido ganar fuerza en las negociaciones. Durante el presente mercado, el conjunto parisino ha remediado su error y ha forjado un equipo competitivo, quitándose de encima a muchas estrellas, falta por ver si Neymar, y cumpliendo, aunque tarde, las promesas que provocaron que Mbappé enviara una carta al club notificándoles su intención de no renovar hasta 2025.
El PSG le ha enviado distintas propuestas al capitán de la selección francesa. La que cobra más fuerza, y se sigue analizando en París, es ofrecerle un acuerdo con una cláusula de salida, algo prohibido en Francia tal y como estipula la Carta de Futbolistas y que no se podría ni homologar la firma entre ambas partes incluso llegando a una cláusula privada sin necesidad de que sea de rescisión. De momento, Mbappé ha rechazado dichas proposiciones, pero no se cierra la puerta a renovar. Escuchará al PSG, con el que no quiere forzar ahora una salida.
A la espera de acontecimientos
Se avecinan semanas importantes en París, porque el PSG ha ganado autoridad después de descartarle de la gira por Japón y que Mbappé apareciera en el palco del Parque de los Príncipes, además de entrar al vestuario del primer equipo, se ha visto en Francia como un gesto de buena fe por parte de muchos dirigentes. Al Khelaïfi y Qatar, si algo han demostrado en los últimos años, es a exprimir hasta el final un culebrón que puede dar un último giro de acontecimientos.
El PSG es consciente de que la situación con Mbappé no podía prolongarse mucho más tiempo. Una vez finalizado el mercado de fichajes, en septiembre, el club está obligado por ley a reintegrarle en la dinámica del primer equipo. Pero ahora mismo, las posturas entre ambas partes son más cercanas que hace un mes, cuando la relación parecía rota, y el entorno del exjugador del Mónaco ha mostrado predisposición para reunirse en los próximos días.
