Overbooking para Luis Enrique

El asturiano tendrá que afrontar la pretemporada con la vuelta de muchos jugadores cedidos y deberá decidir si cuenta con ellos o si les enseña la salida.

Andrés Onrubia
As
Entre bambalinas, Luis Enrique ya está trabajando como entrenador del PSG pese a que todavía no ha sido presentado. El asturiano, que firmará dos temporadas con opción a otra suplementaria, deberá afrontar como primera prueba en la capital francesa el overbooking de jugadores que se encontrará en la vuelta a los entrenamientos, prevista para el próximo 10 de julio salvo para los internacionales del mes de junio.

La temporada pasada, en un ejercicio de ingeniería total, Luis Campos, consejero deportivo del PSG, descartó a una gran cantidad de jugadores para aligerarle la plantilla a Galtier. Aunque no pudo consumar muchas ventas, consiguió un sinfín de cesiones que le dieron un margen al club en cuanto a su enorme masa salarial, que ascendió a 721 millones de euros. Ahora, el portugués, en consonancia con Luis Enrique, deberá volver a desengrasar una plantilla que podría ascender a 30 jugadores en los próximos días.

Icardi, Paredes, Diallo, Ebimbe (traspasado por 6 millones al Eintracht), Wijnaldum, Draxler, Dagba, Keylor Navas, Kurzawa, Michut, Kari, Gassama, Nagera, Randriamamy y Ahamada fueron todos los jugadores que cedió el PSG a lo largo del curso pasado. Icardi, que no cuenta para la dirección deportiva, mostró un gran rendimiento en el Galatasaray y podría volver a Italia en el presente mercado. El conjunto turco, por otra parte, está negociando con el PSG el fichaje de Paredes, que aunque reconoció en una entrevista reciente que quería hacer la pretemporada, el fichaje de Ugarte le aleja definitivamente de la capital francesa.

Respecto a Diallo, por el que el Leipzig no ejerció la opción de compra, la operación de venderle se anticipa complicada. El defensa ha sufrido bastantes lesiones en los últimos meses y no cuenta con una alta estima en el mercado. Mismo caso para Wijnaldum, que se rompió el ligamento de la rodilla, impidiéndole ir al Mundial, nada más aterrizar en Roma o Draxler, que ha pasado desapercibido en su cesión en Lisboa al Benfica. El objetivo del PSG es venderles, pero ahora mismo hay pocos pretendientes dispuestos a pagar en concepto de traspaso por ficharles.

Keylor Navas vuelve a París después de una cesión fructífera en el Nottingham Forest. Aunque Luis Enrique todavía no ha decidido, la titularidad de la portería debería ser para Donnarumma, que fue la apuesta fuerte del PSG hace dos años. El costarricense, al contrario que otros jugadores, sí tiene un buen cartel en Europa y podría marcharse traspasado en el mes de julio. Kursawa, Michut, Kari, Gassama o Nagera no deberían, por otra parte, arrancar la pretemporada con los parisinos. Los dirigentes siguen trabajando para buscarles una salida, ya sea cedidos o traspasados.

A ellos hay que añadirles los fichajes que deberán anunciarse a lo largo de esta semana. Si el PSG todavía no ha anunciado ni una incorporación es porque quería que computaran en el presente ejercicio para que el Fair Play Financiero, cuyo nuevo reglamento entra en vigor a partir de esta temporada, no le expusiera demasiado y le otorgara mayor margen de maniobra. Ugarte, Asensio, Skriniar, Lucas Hernández, Kang-in Lee y Ndour son, de momento, los seis fichajes que ha materializado el club en el presente mercado estival. Luis Enrique tiene trabajo en las próximas semanas para cincelar definitivamente el equipo con el que afrontará su primer año en París.

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