Luis Enrique necesita refuerzos a la espera de la salida de Mbappé
Los dos partidos de pretemporada en Japón han evidenciado que al técnico asturiano le faltan refuerzos ofensivos, más si cabe sin Kylian Mbappé.
Desde el 5 de julio, día en el que fue presentado como nuevo entrenador del PSG, Luis Enrique ha reiterado en sus dos únicas comparecencias públicas que “la plantilla no está cerrada y faltan incorporaciones”. El mensaje, contundente, ha sido captado claramente por Al Khelaïfi y Qatar, que le prometieron una plantilla competitiva y de garantías, durante las negociaciones en el mes de junio, para luchar por las tres competiciones.
El primero que puede aterrizar en la capital francesa podría ser Ousmane Dembélé. Tal y como adelantó AS, el extremo del Barcelona es el elegido para suplir a Kylian Mbappé, aunque podría llegar incluso con el culebrón de su compañero de selección sin resolverse. Las negociaciones entre el PSG y el jugador han comenzado esta semana, aunque todavía no hay nada cerrado pese a que algunos medios franceses lo dieron por hecho.
Dembélé es un perfil que ha sido validado por Luis Enrique. El técnico asturiano tiene en una gran estima al campeón del mundo de 2018, valorando su capacidad para regatear y su electricidad partiendo desde la banda derecha. En el 4-3-3 que quiere implantar el exseleccionador español en París, actuaría en la banda derecha a priori, con Neymar en la izquierda y con un delantero, que no será Mbappé salvo sorpresa, que haga de referencia. Harry Kane es el favorito, pero su operación se anticipa muy complicada porque el Bayern es el favorito para hacerse con los servicios del atacante inglés.
La llegada de Dembélé supondría un soplo de aire fresco para Luis Enrique, que no ha podido contar con Mbappé, descartado, en la gira por Japón y de momento tampoco con Neymar, convaleciente aún de su lesión en el tobillo. Tanto Luis Campos como Al Khelaïfi saben que la plantilla no está ni mucho menos cerrada y siguen trabajando para apuntalarle el equipo a la espera, por supuesto, de que se resuelva el culebrón de Kylian Mbappé.
Según informó L’Équipe, el PSG ofreció 50 millones de euros esta semana a la Atalanta por Rasmus Hojlund, delantero danés de 20 años que marcó 9 goles la temporada pasada en la Serie A. Luis Enrique quiere a un nueve y la dirección deportiva está dispuesta a hacer grandes esfuerzos para complacerle. Sin embargo, el dossier se anticipa complicado porque el Manchester United ha tomado la delantera y tiene el sí del jugador.
El fichaje de Dembélé, en caso de materializarse, no altera la hoja de ruta de Luis Campos de querer brindarle a Luis Enrique a Bernardo Silva. Aunque el Manchester City está intentando persuadirle de que renueve, el jugador se resiste. El PSG le ofrece mejores condiciones económicas, además de ser una pieza indiscutible en los esquemas del técnico español. Sin embargo, todavía no hay nada avanzado y todo depende, ahora mismo, de la salida de Mbappé por una cuestión meramente económica.
Luis Enrique podría perder en los próximos días a Verratti, un centrocampista al que veía idóneo para adaptarse a su estilo de juego, pero que ha decidido marcharse al Al Hilal. El conjunto saudí debe ahora negociar con el PSG, que pide más de 40 millones de euros por el italiano. En caso de concretarse su salida, Luis Campos deberá encontrar en el mercado un mediocentro de garantías y que se asemeje a la calidad de Verratti, que ha sido durante 12 años un jugador insustituible en París. El PSG animará el final de mercado, aunque el tiempo corre en su contra al comenzar oficialmente la temporada en apenas dos semanas.