Graves incidentes en el triunfo de Atlético Tucumán sobre Central Córdoba, en Santiago del Estero, con “hinchas neutrales”
Un escándalo resultó el encuentro que el Decano se impuso en el Madre de Ciudades, con desmanes antes y durante el espectáculo
Más tarde, durante la segunda mitad y también luego del encuentro, siguieron los disturbios. Sillazos, pedradas, lucha cuerpo a cuerpo. Y hasta la detención de un fotógrafo del diario La Gaceta de Tucumán, Franco Vera, que solo cumplía su labor de sacar fotografías y realizar videos de lo que estaba ocurriendo. Fue un bochorno.
El árbitro Andrés Gariano paró el juego a los 11 minutos cuando en una de las plateas se registraba un desborde entre hinchas de uno y otro equipo que intentaban agredirse. Hubo miles de hinchas tucumanos, en una situación poco habitual, ya que en el fútbol argentino está prohibida la presencia del público visitante.
Y solo bajo la figura “de neutrales” se acepta en determinadas circunstancias; en Córdoba o en Mendoza, por ejemplo. El experimento con los tucumanos en Santiago del Estero tuvo serias fallas del operativo de seguridad, más allá de la ira de unos y otros, evidentemente con rencores que exceden el marco del fútbol.
Los inconvenientes comenzaron cuando simpatizantes de Atlético fueron descubiertos supuestamente en un sector habilitado para los fanáticos del Ferroviario. Los jugadores de ambos clubes se acercaron al lugar para pedir calma a los hinchas, preocupados por la presencia de familiares en una zona cercana a la de los incidentes. Gariano mantuvo su decisión hasta recibir el compromiso del jefe de operativo de seguridad sobre la posibilidad de reanudar el luego, algo que sucedió cuando la interrupción cumplía media hora.
Al margen de los incidentes, Atlético Tucumán prolongó este sábado su buen presente con una victoria sobre Central Córdoba por 2-0 en Santiago del Estero, donde estuvo acompañado por una multitud de “neutrales”, que cubrieron toda una cabecera del Estadio Único Madre de Ciudades. El mediocampista Bautista Kociubinski y el delantero Cristian Menéndez, a los 33 y 39 minutos del segundo tiempo, marcaron los goles del partido válido por la 27° y última fecha de la Liga Profesional.
La tarde en Santiago de Estero estuvo teñida de violencia por los incidentes que motivaron la suspensión momentánea del juego durante media hora. A los 10 minutos, el árbitro Andrés Gariano paró las acciones por una pelea entre hinchas de Central Córdoba y Atlético sobre una de las plateas del estadio. Después de los goles, como consecuencia de los festejos de los hinchas visitantes, también se registraron focos de conflicto en diferentes puntos de las tribunas. Rompieron las butacas y las arrojaron al vacío, entre otros momentos de desenfreno.
Atlético confirmó su gran momento deportivo tras la salida de Lucas Pusineri. Con la dupla Orsi-Gómez, el Decano se mantiene invicto, sin recibir goles, con cuatro triunfos en cinco partidos. Esta racha lo alejó de la pelea por la permanencia y lo puso a un punto de la zona de clasificación para la Copa Sudamericana, que cierra Godoy Cruz, de Mendoza con 38 unidades. En contraste, Central Córdoba sufrió su cuarta derrota consecutiva en el torneo, en el que terminó 22° con 29 unidades.
Lo mejor de la victoria de Atlético Tucumán
Según resume La Gaceta, en un momento, en la puerta de la cancha, los simpatizantes tucumanos empezaron a correr tras arrojar una valla y, en ese instante, lejos de calmar las cosas, los agentes de la fuerza empezaron a disparar con balas de gomas. Franco Vera, de ese diario, registraba el momento. Fue allí que policías lo interceptaron, le sacaron su cámara y lo llevaron a una comisaría. En el estadio, mientras tanto, se registraron incidentes hasta el anochecer, con múltiples heridos, todos sin gravedad, según se supo.
El mediocampista de Atlético Tucumán, Joaquín Pereyra, el valor más destacado, remarcó esta tarde que “el futuro todavía no está decidido” en relación a si permanecerá en el Decano o tendrá algún otro destino, como River. ”Todavía soy jugador del club, hoy hicimos un esfuerzo enorme para lograr los tres puntos. Ahora en este receso voy a ver qué pasa, charlar con el club a ver qué es lo mejor”, explicó el jugador, de 24 años. ”Estoy muy contento en lo personal por el momento que estoy viviendo y lo estoy disfrutando mucho”, apuntó el volante, ex Rosario Central, que habilitó a Bautista Kociubinski en el tiro libre que le permitió abrir la cuenta al elenco tucumano.