Flamengo destituye a preparador físico que agredió a Pedro; Sampaoli asienta la permanencia
La crisis comenzó este sábado, poco después de la remontada sobre el Atlético-MG, en el estadio Independência, en Belo Horizonte.
El puñetazo en la boca del delantero Pedro fue el detonante de una crisis que se arrastraba entre bastidores en el Flamengo desde hacía algunos meses. Esta agresión dejó insostenible la permanencia de Pablo Fernández. El preparador físico, que ha sido miembro del comité permanente de Jorge Sampaoli durante prácticamente toda su carrera, fue despedido por justa causa este domingo (30). La decisión se tomó con el consentimiento del presidente Rodolfo Landim, quien se encuentra en Miami, pero habitualmente habla por teléfono con los directores.
El caos estalló este sábado (30), justo después de la remontada sobre el Atlético-MG, en el estadio Independência, en Belo Horizonte, por la 17ª jornada del Brasileirão. Los jugadores aún celebraban el resultado sobre el césped cuando Pablo y Pedro iniciaron una discusión en el vestuario que acabó con agresiones físicas y riñas generalizadas entre deportistas, comisión y directiva.
El club al menos consiguió sortear la situación y mantener a Jorge Sampaoli al frente del equipo. Reuniones a lo largo del día ya indicaban permanencia, sin embargo, el martillazo solo fue golpeado en la reunión celebrada el domingo por la noche. El técnico suele dirigir el entrenamiento de los lunes por la mañana, en el Ninho do Urubu.
El interés de quedarse en Flamengo sin Pablo se debe a que Sampaoli, amigo y compañero de mucho tiempo, siente que está cumpliendo un "sueño" al frente del equipo. Recientemente, en una entrevista, el técnico se mostró confiado en la presencia de Rubro-Negro en la final de la Libertadores en Maracaná.
De Pablo, se puede decir que la salida era segura incluso antes de que la delegación regresara a Río de Janeiro. El profesional se quedó en Belo Horizonte para prestar testimonio en la comisaría, al igual que Pedro, quien también tuvo que pasar un examen médico en el Instituto Médico Legal (IML) de BH para registrar el caso. El informe señaló lesiones en la cara y la boca del atleta.
Pablo Fernández, además de preparador físico, fue una figura importante en el cuerpo técnico de Sampaoli. Tuvo voz activa en las decisiones e incluso dio formación en Ninho do Urubu. Por ahora, la situación de Marcos Fernández, el hijo de Pablo, está indefinida.
Pedido de disculpas
El preparador físico llegó a Río este domingo por la mañana y permaneció en silencio hasta que se hizo un anuncio oficial. En el texto, se disculpó y trató de justificarse: "Entré al vestuario muy molesto, con ganas de resolver la situación pronto, y lo hice mal".
Pablo reforzó su deseo de arreglar con Pedro en otro momento y afirmó que "trabajará para ser mejor". También destacó que "pensó toda la noche" y que "le gustaría volver atrás en el tiempo". Dentro de su argumentación, dijo que “la alta competencia suele tener cosas que nos hacen mal”. También cita el "alto estrés" como condición para la agresión.
"Lo que existe es el presente y el futuro. Esto es pedir perdón y volver a intentarlo. Cada vez que sea necesario. Lo siento y me gustaría corregir. La alta competencia suele tener cosas que nos hacen mal. Situaciones de alto estrés que nos hacen reaccionar y pensar mal. No pretendo situar este contexto como una excusa, sino como una explicación. Definitivamente, si tuve desacuerdos con Pedro, debí haberlos resuelto en otro momento y de otra manera. Intentaré que eso suceda. Trabajaré para cambiar y ser mejor”, escribió.
La neutralidad de Sampaoli es criticada
Sampaoli generó más polémica por una posición neutral, colocando agresor y agresor en el mismo estante. El argentino intentó poner "paños calientes" para despejar el desconcierto y optó por quedarse arriba del muro, sin tomar partido por ningún lado.
En una nota, escribió que "toda persona tiene derecho a equivocarse". También destaca una frase en la que dice que hay "un conflicto interno (en Flamengo) cuyos motivos existen, pero en este momento no importan". El pasaje implica que la agresión fue provocada por alguna razón justificable.
Parte del grupo y la multitud acusan a Sampaoli de "pasarle tela" a Pablo.
Pedro también expresó
Antes de que hablaran Sampaoli y Fernández, Pedro habló públicamente de la agresión que sufrió. En el texto publicado anteriormente en sus redes sociales, el número 9 citó los "minutos cortos recibidos en los últimos partidos", pero destacó que "lo que pasó hoy fue más grave que lo que pueda pasar dentro de las cuatro líneas". También subrayó que fue "atacado cobardemente".
"Cobardemente, sin motivo e inexplicablemente fui atacado, con un puñetazo en la cara, por Pablo Fernández, miembro de la comisión técnica de Sampaoli. Agredir a otro no merece el respeto de nadie. He pasado por muchas pruebas aquí en Flamengo. pero nada se compara con la cobardía sufrida hoy. Que Dios perdone a una persona que, en pleno 2023, piensa que la agresión física puede solucionar cualquier problema. Gracias JESÚS por enseñar, poner la otra mejilla”, resaltó.
La pelea
No todos los jugadores vieron el puñetazo del preparador físico Pablo Fernández a Pedro, pero el grupo rápidamente se solidarizó con el atacante. Según ESPN, el primer jugador en irse fue Thiago Maia, quien pronto llamó a Gérson. El número 20, que trabajaba con Sampaoli y Pablo en Francia, no había visto el puñetazo, pero, ante los informes, se dirigió hacia Pablo Fernández, agarró al entrenador por el cuello y le gritó: "¿Estás loco? ¡Cállate!".
Perplejo inicialmente, Pedro no pudo mostrar ninguna reacción ante la agresión que sufrió. Después, con Fernández atado, el agresor se rebeló y gritó: "¡Ese mal personaje me dio un puñetazo en la cara!".
Al escuchar el informe de Pedro, Gabigol, líder del grupo, se acercó a hablar con su compañero. Poco después, el diputado de fútbol Marcos Braz y el director ejecutivo Bruno Spindel ingresaron al vestuario y vieron la escena. La directiva, así como el técnico Sampaoli, no presenciaron el momento de la agresión. En los minutos siguientes, los jugadores rodearon a Pedro y se solidarizaron. En el discurso repitieron que estaban con el atacante.
