F1 | GP DE HUNGRÍA Verstappen desespera y Sainz y Alonso van hacia atrás
Séptima victoria seguida de Max, sin oposición por delante de Norris y Pérez. Sainz es octavo con ‘undercut’ de Ferrari y Alonso, noveno.
Había gran expectación antes de la arrancada, el calor obligaría a una carrera estratégica y Red Bull no lo tendría tan fácil con un Mercedes delante y dos McLaren detrás. Además había más coches ‘fuera de posición’ en la parrilla. Pero nada, semáforos apagados y todos a su sitio: Verstappen primero, los dos Alfa Romeo a la cola (Zhou se quedó clavado), los dos Alpine al garaje (toque múltiple de Gasly, Ocon, Ricciardo…) y Sainz de vuelta al top-6 gracias a una enorme arrancada desde el undécimo, propiciada también por la estrategia arriesgada de salir con blandos. Alonso defendía la séptima plaza por entonces.
El grupo se estiró demasiado pronto. A Verstappen le perseguía Piastri inicialmente, pero McLaren ejecutó el ‘undercut’ a la perfección y situó segundo a Norris, su mejor baza. Detrás Hamilton asistía impasible a la enorme superioridad de los coches de Woking. “Me estáis apagando el motor”, protestó por la radio. “Gestionamos la situación con la temperatura”, le respondieron. Vamos, que sí.
El ‘undercut’ de Ferrari
Con la carrera adormecida, Ferrari empezó a hacer de las suyas. La primera parada de Leclerc duró 9.4 segundos y le mandaron al pelotón por detrás de Sainz. Para compensar, en la segunda le pararon una vuelta antes que a Carlos, cuando se supone, en cualquier equipo y en cualquier situación, que el coche que va delante tiene prioridad. Así que el muro de Maranello ejecutó otro ‘undercut’ de manual para que el monegasco adelantara al madrileño. Como las hadas de las carreras son caprichosas, Leclerc recibió cinco segundos de penalización por excederse con el límite de velocidad en el ‘pit-lane’ y terminó finalmente séptimo, detrás de Russell, pero delante de Sainz. Verstappen no ayuda, pero qué aburridas serían las carreras sin Ferrari.
Pérez remontó hasta la tercera posición, pero llegó con lo justo a Lando. Así que cruzaron la meta Verstappen, nadie, nadie más, y más de medio minuto después, Norris y Checo. Lo más agresivo que hizo el inglés en sobre Max fue romperle el trofeo en el podio. Hamilton y un Piastri sin el ritmo de su compañero completaron el top-5.
Ahí, en ese top-5, estuvieron durante buena parte de la temporada Sainz y Alonso, pero ahora casi cierran el top-10. Carlos fue octavo, adelantado sin dificultad por Russell, y Alonso noveno en una carrera de ritmo sin luchas. ¿Qué está pasando? La mejoría de McLaren, el cambio en las carcasas de los neumáticos, el extraño formato de uso de las gomas, la falta de evoluciones de unos, la falta de acierto en casi todo de otros… el año de los podios degenera en otra cosa cuando se acerca el parón del verano. Queda media temporada por delante, margen de sobra para corregir lo que se esté haciendo mal. Pero en Hungaroring, que tradicionalmente ofrecía oportunidades para los coches ‘pequeños’ y limitaba las diferencias, la victoria o el podio no podrían haber estado más lejos.