Por qué es mejor adoptar antes que comprar un animal de compañía
Para sumar un nuevo integrante a nuestra familia multiespecie, es fundamental evaluar algunos aspectos. Los mejores consejos a la hora de incorporarlos al hogar y por qué es importante identificarlos como “personas no humanas”
En el mundo, hay mayor cantidad de animales de compañía y de afecto, y animales de familia que los que el ser humano puede atender económica y afectivamente. Por supuesto, que cada uno hace con su dinero lo que tenga ganas.
Pero lo cierto es que a la hora de adoptar un animal, porque siempre es una adopción, tenés que pensar en lo siguiente: si es un cachorro o si tiene 15 años. Incluso, tenés que pensar que, mínimo, tenga 60 días de haber nacido.
Incluso, tenés que pensar que lo debés impulsar a que sociabilice con otros animales hasta los cuatro meses y educarlo, porque eso va a ser una consecuencia favorable para el resto de tu vida.
Un animal adoptado, es todo animal. Por ejemplo, en el vínculo con un perro, no es simplemente encontrarse con un perro en la calle, rescatarlo de un refugio, rescatarlo de un hogar de tránsito, o rescatarlo del abandono. La adopción es el único término válido para integrar el concepto de vivir con un perro.
Ahora, dije adoptar y hablé de dinero. En cuanto a la compra, si podés evitar comprar, evita comprar. Porque filosóficamente es una contradicción muy grande.
Porque si decimos que los perros y los gatos son personas no humanas, personas sensibles, sintientes, sufrientes y son sujetos de derecho y no objetos, no los podés comprar. Porque vos no comprás una persona, vos no compras un hijo.
Entonces, en este concepto filosófico, la adopción es ideal. Y, además, tenés que tener en cuenta, a la hora de adoptar, que le estás dando una nueva vida a un ser y estás, en realidad, conceptualizando tu necesidad de afecto vinculándote con otro ser vivo.
El famoso apotegma moderno “Adoptá, no compres”, significa que el dinero no puede ser la excusa que determine que tenemos un afecto. No podemos simplemente elegir un animal porque podamos predecir lo que va a hacer. Adoptá antes que comprar. Creo que ese es el concepto.
Y el concepto más claro es que siempre que te vincules con un perro o gato significará una adopción. Al entregar tu corazón y que él te lo entregue durante los próximos años, hasta el último de sus días, es cuando tu perro será un animal de compañía adoptado por vos.
Pero también este aspecto nos abre otra “puerta”. Si tenés cierta edad y vas a poder adoptar, sería mejor que adoptaras, un animal de cierta edad. No digo que adoptes un viejito, pero adoptar un animal adulto porque vos no tenés la misma paciencia que tenías antes para soportar toda la educación que un cachorro te conlleva.
Y si tenés un núcleo familiar, acordate de adoptar los viernes. ¿Por qué? Porque el viernes adoptaste el cachorro, lo trajiste a casa y te quedó el fin de semana de vínculo directo. Si lo adopta un martes, el miércoles todo el mundo se va a su trabajo, a la escuela, el cachorro se queda solo, hace pis, hace caca, rompe algo porque el cachorro tiene una duración limitada en ese núcleo familiar.
Y te dejo un mensaje final para que lo puedas analizar siempre: evitá la peor forma de maltrato, que es el abandono y adoptá responsablemente.
Adoptá, pensalo antes de comprar y adoptá, adoptá.