Oficial: Modric, hasta 2024
Renueva por una temporada y jugará en el Madrid, mínimo, hasta rozar los 39 años. Será el segundo capitán, tras Nacho. Ha rechazado 200 millones de Arabia.
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“Quiero seguir porque me lo merezca, no porque me lo regalen. Nunca me han regalado nada en mi vida y no va a ser ahora”, proclamó en Anfield, el pasado 20 de febrero. Una rueda de prensa que dio la vuelta al mundo y a la que sólo le faltó un puñetazo sobre la mesa. Fue transparente en un momento confuso. Pero lo tenía claro; siempre lo ha tenido. Así, cuatro meses y un Galáctico nuevo después (Bellingham), nada ha cambiado. Y eso que los cantos de sirena que la han llegado han sido de ópera: hasta hace una semana, tenía la posibilidad de irse a Arabia Saudí, cobrando 200 millones. Pues la respuesta ha sido tajante: no.
Pese a que los minutos en el Madrid van a estar más caros que nunca, se queda. Y jugará, mínimo, hasta rozar los 39 años, teniendo en el horizonte un récord: ser el segundo más veterano en disputar un partido con el Real Madrid. Una marca que, de momento, tiene Paco Buyo (38 años y 63 días). Modric la superaría de jugar algún encuentro a partir del próximo 12 de noviembre (ese día hay fijado un Real Madrid-Valencia, idóneo para el homenaje). La cota más alta de ese ochomil: Ferenc Puskás llegó a jugar con 39 años y 36 días. Para cazarle, a Modric no le valdría con esta renovación, sino que necesitaría una más. De momento, carpe diem. Firma hasta 2024, otra temporada. Sin temor a la competencia.
Siete centrocampistas
Una competencia que apunta a feroz. Porque este curso Ancelotti tendrá más hombres en la sala de máquinas que nunca con siete: Camavinga, Tchouameni, Bellingham, Modric, Kroos, Valverde y Ceballos. Y sólo tres puestos, que cómo mucho podrían ser cuatro, de confirmarse la metamorfosis del 4-3-3 hacia un 4-3-1-2. Eso le abriría más la puerta a un Modric que sabe que la llegada de Bellingham viene a ser su relevo. Pero quiere posponer la permuta lo máximo. Este curso, sin Mundial, apunta a estar más fresco físicamente (él mismo reconoció que Qatar le pasó factura la temporada pasada) y va a dar batalla. A la espera de su decisión con Croacia, la continuidad en el Madrid ya es un hecho.
Persiste el cerebro de los 488 partidos oficiales, actual 16º en la carrera. Acechando a auténticas leyendas como Chendo (498), Roberto Carlos (527) o Guti (542). De coger al brasileño, sería el segundo extranjero con más partidos en la historia del club, sólo por detrás de Benzema (648). Y eso, en materia de números, pero en cuanto a títulos, la cantidad también es opulenta: cinco Champions, tres Ligas, dos Copas del Rey, cinco Mundiales de Clubes, cuatro Supercopas de Europa y cuatro Supercopas de España. Y el rubí del tesoro: un Balón de Oro. Modric, el ‘padre’ de Rodrygo, el niño que escapó de la guerra, aquel al que sus compañeros llaman cariñosamente “vinagre” (“¡dicen que cuando pierdo, aunque sea entrenando, me lo tomo mal!”, bromeó), se queda en el Madrid. De momento, un año más. Hasta 2024.
En su “dulce hogar”
El 10 del Real Madrid reaccionó a través de sus redes sociales y celebró el anuncio de la renovación. “Hogar, dulce hogar”, tuiteó junto al hashtag #Modric2024. En Instagram, el Real Madrid y el jugador publicaron el comunicado de manera conjunta.
