Joselu cambia la dinámica
Hasta el delantero de 33 años, Florentino Pérez sólo había fichado a dos jugadores que superasen la treintena: Ricardo Carvalho (2010-11) y Diego López (2012-13). El ariete, su incorporación más veterana.
El que rompió la regla no escrita de los 30 por primera vez fue Ricardo Carvalho. El 10 de agosto de 2010, un Carvalho de 32 años era oficialmente nuevo jugador del Real Madrid. Petición expresa de José Mourinho, su gran valedor. El técnico acababa de sustituir a Manuel Pellegrini tras ganarlo todo con el Inter y quiso a su lado a su central fetiche, que también le acompañó en Oporto y Chelsea. Tres temporadas (77 partidos, 3 goles) con rendimiento decreciente, pero que dejó un buen poso fundamentado en una primera campaña donde mostró su mejor cara.
Mientras que el 25 de enero de 2013 se orquestó el aterrizaje de Diego López, auspiciado por una lesión de Iker Casillas. Diego López llegaba en el mercado invernal procedente del Sevilla y terminó en medio del conflicto Casillas-Mourinho. “A mí me gusta más Diego López como portero que Iker Casillas. Es simple. No es personal, me gusta un portero que juega bien con los pies, domina el espacio aéreo y es un fenómeno bajo palos”, llegó a decir el técnico portugués con la polémica candente. El de Paradela, sin Mou, mantendría la titularidad con Ancelotti en Liga, aunque en Champions fue Iker el elegido y en 2014 el fichaje de Keylor Navas pondría fin a su segunda etapa en el Real Madrid.
Oportunidad de mercado
Y desde enero de 2013, hasta ahora. Diez años y medio después, el equipo blanco se hace con un treintañero. En las dos etapas de Florentino Pérez, hasta un total de 88 fichajes y sólo tres por encima de ese techo de cristal oficioso. Joselu cambia la dinámica, ejemplificada por los Vinicius, Rodrygo, Militao, Valverde, Camavinga, Tchouameni o recientemente Bellingham. Apuestas por futbolistas de un futuro inestimable y un potencial enorme por cantidades importantes, pero lejos del montante que habría que desembolsar si se espera a su explosión definitiva. Trufado eso sí con perfiles más experimentados como Alaba o Rüdiger, que debutaron con 29 años. El caso del futbolista nacido en Stuttgart es similar al del austríaco y al alemán, pues responde a una oportunidad de mercado.
El descenso del Espanyol dibujaba un horizonte contractual muy amable para todo aquel ávido de pescar en el drama espanyolista. Una cláusula que permitía la cesión a todo aquel equipo dispuesto a asumir la ficha de Joselu. El Real Madrd, antes incluso del adiós de Benzema, necesitaba un ‘9′. Vasos comunicantes que, no obstante, no trazaron una negociación tensa. Al contrario, de ahí que el club blanco haya aceptado pagar 500.000 euros por la cesión (con opción de compra posterior) y acordar opción preferencial para que el Espanyol pueda nutrirse de jugadores del Castilla. Es más, se habla concretamente de que dos castillistas pondrán rumbo al RCDE Stadium una vez finalice la fase de ascenso. El Real Madrid incorpora al último Zarra (16 goles en Liga), con experiencia en el club, internacional con España (clave en la consecución de la Nations League)... Un puzle donde todas las piezas han encajado.