Tensión en Kosovo: nuevos enfrentamientos con serbios dejaron 30 soldados de paz de la OTAN heridos
Al menos 50 personas también resultaron heridas durante los choques. Los manifestantes exigían la retirada de los Ayuntamientos de los nuevos alcaldes elegidos el pasado abril
Los serbios iniciaron los enfrentamientos con la policía la mañana del lunes en el municipio de Zvecan, ubicado a unos 45 kilómetros al norte de la capital Pristina. Por la tarde, soldados de la KFOR pidieron a los serbios abrir paso a dos vehículos de las fuerzas de la policía especial de Kosovo.
Posteriormente, al persistir el bloqueo del paso por parte de los manifestantes, los soldados arrojaron gases lacrimógenos y granadas aturdidoras para proteger a los agentes de Kosovo que se encontraban dentro de los vehículos y dispersar a los manifestantes, según testigos y reportes de la prensa local.
Los serbios, en tanto, respondieron lanzando piedras y otros objetos.
“Varios soldados del contingente italiano y húngaro de la KFOR fueron objeto de ataques no provocados y sufrieron heridas por trauma con fracturas y quemaduras debido a la explosión de artefactos explosivos”, señalaron los cuerpos de paz en un comunicado.
El jefe de la misión, el general Angelo Michele Ristuccia, calificó de inaceptables los ataques y aseguró que la KFOR seguirá cumpliendo su misión de forma imparcial.
Algunos vehículos de la policía de Kosovo y uno perteneciente a periodistas sufrieron daños durante el enfrentamiento. Imágenes mostraban que los vehículos fueron pintados con símbolos nacionalistas serbios.
Los choques también dejaron al menos 50 manifestantes heridos. Las personas fueron atendidas en un hospital con dolencias causadas por intoxicación con gas lacrimógeno y por contusiones, tres fueron hospitalizados y una persona sufrió heridas graves de bala y su vida está en peligro, informó el director del Centro Clínico de Mitrovica, Zlatan Elek, según la emisora N1.
Estados Unidos y la Unión Europea han denunciado los ataques de los manifestantes serbios contra las fuerzas de la OTAN.
Los serbios, minoría en Kosovo pero grupo mayoritario en el norte del país, protestaban ante el Ayuntamiento de la localidad de Zvecan para exigir la retirada del nuevo alcalde, de la mayoría albanesa.
Cientos de serbios se manifestaron hoy en tres municipios del norte de Kosovo para exigir la retirada de los Ayuntamientos de los nuevos alcaldes elegidos el pasado abril en unas elecciones boicoteadas por la comunidad serbia, mayoría en esos municipios.
Soldados de la misión KFOR, encargada de vigilar la seguridad en Kosovo, se desplegaron entre unidades de la policía especial kosovar, que se encuentra frente a las instalaciones municipales, y los manifestantes.
Los serbios del norte de Kosovo no reconocen la autoridad de los nuevos alcaldes, elegidos el pasado abril en unos comicios en los que la participación fue de apenas el 3% debido al boicot de los serbios, que son minoría en Kosovo pero gran mayoría en cuatro municipios del norte kosovar.
Las elecciones fueron organizadas después de que los representantes de los serbokosovares se retiraran el pasado noviembre de las instituciones de Kosovo para denunciar la discriminación que, aseguran, sufren por parte del Gobierno central.
Pristina rechazó la propuesta del embajador de Estados Unidos, Jeffery Hovenier, para que, en interés de la desescalada, los nuevos alcaldes ejerzan sus cargos desde otras instalaciones.
Se trata del más reciente incidente de violencia luego de que escalaron las tensiones la semana pasada, cuando Serbia ordenó a sus fuerzas militares que estuvieran en alerta máxima y desplegara a más elementos hacia la frontera con Kosovo, la cual declaró su independencia de Belgrado en 2008.
El presidente de Serbia, Aleksandar Vucic, acusó al primer ministro de Kosovo, Albin Kurti, de provocar los incidentes, al haber usado a fuerzas de la policía especial.
Vucic pidió a los serbios de Kosovo que se manifiesten de forma pacífica y que “no entren en conflictos con la OTAN”.
Kosovo y Serbia han sido rivales durante décadas y Belgrado se rehúsa a reconocer la soberanía de Kosovo.