NEWCASTLE 4 - BRIGHTON 1 / El Newcastle acaricia la Champions
Con su victoria por 4-1 frente al Brighton, los blanquinegros aventajan al Liverpool en cuatro puntos a falta de dos jornadas.
Con una presión avanzada e intensa, el Newcastle United no dio respiro a su rival. El Brighton apenas gozó de posesión durante el primer tiempo, apenas pudo salir de su propio campo. El acoso y derribo ejercido por los locales encontró su recompensa a los 22 minutos de juego. Moises Caicedo trató de despejar un córner de Kieran Trippier, pero solo logró desviar el centro a la red. Lejos de levantar el pie del accelerador, el equipo de Eddie Howe siguió a lo suyo. Y al de Roberto De Zebri le costó achicar la presión. Para cuando empezaron a hacerlo, cuando se acercaron tímidamente a la meta de Nick Pope, Daniel Burn dobló la ventaja de los blanquinegros. Cabeceando un córner de Trippier en el tiempo de descuento.
Faltaba la sentencia. Pudo llegar a los cuatro minutos de la reanudación, cuando Jason Steele sacó el intento de Miguel Almirón. Pero no fue así, y 45 segundos más tarde, Deniz Undav se encontró mano a mano con Pope gracias a un pase al espacio y a un despite defensivo del Newcastle United. Marcó para recortar la distancia en el marcador y añadir emoción al duelo. A los locales les temblaron las piernas, y los visitantes, que borraron al Arsenal de la lucha por el título el fin de semana, volvió a creer en sus posibilidades.
Se hinchó entonces St James’ Park. Se llenó de nervios y tensión, y la hinchada llenó sus pulmones. Para alentar a los suyos, pero también al contener la respiración cuando el Brighton acechó su portería. Poco antes del pitido final llegó el momento de liberar aire. Con alivio primero y con éxtasis después. El Newcastle United salió bien con la pelota jugada en el minuto 89. Almirón arrancó hasta el centro del campo, desde donde pasó el balón a Callum Wilson. El inglés marcó su decimoprimer gol en sus últimos diez partidos. Dos minutos más tarde, en una acción veloz, y después de recortar ante Steele, Wilson vio llegar a Bruno Guimaraes. Pase de la muerte, gol del brasileño, y explosión de alegría en la ciudad del noreste de Inglaterra.