NBA | PLAYOFFS 2023 | WARRIORS-LAKERS (1-2) / LeBron James y Anthony Davis invitan a la esperanza
Los Lakers pasan por encima de los Warriors y ponen el 1-2 en la eliminatoria. Dejan atrás las malas sensaciones del segundo encuentro.
El partido comenzaba igualado. Steve Kerr repetía con JaMychal Green de titular, en lugar de Kevon Looney, como ya hiciese en el Game 3. El protagonista en el inicio fue D’Angelo Russell. 13 puntos para el base, 11 de ellos de manera consecutiva, para mostrar una declaración de intenciones de que los Lakers son algo más que sus estrellas.
A los Warriors les costó entrar en el partido. Los dos Green poblaban la zona en los intentos de penetración de Davis y Vanderbilt. Kevon Looney salió a mitad del primer cuarto para comprobar si podían volver a la regularidad defensiva que mosrtaron en partidos anteriores.
Ham volvió a repetir con Schröder sobre Curry, y la jugada no pudo salir mejor. Klay comenzó a tener protagonismo con tres triples y tomando el balón cuando Curry se fue al banquillo. Sorprendentemente, 0 puntos en el casillero de LeBron al término del primer cuarto. Los primeros minutos dejaban un 23-30 en el marcador que no fue fiel a lo que sucedería después.
El segundo cuarto comenzó con un Intercambio de canastas. Los Warriors salían victoriosos con el ritmo alto y los lanzamientos liberados, pero los Lakers buscaban cambiar de ritmo, ser más verticales. LeBron se propuso dejar a un lado el rol de anotador y adoptar el de director de orquesta. Asistiendo a sus compañeros desde el poste, en transiciones... Los Warriors se activaron en el rebote ofensivo, pero los fallos les lastraron. Encadenaron 10 errores en 11 lanzamientos consecutivos. Los angelinos tomaban una ligera ventaja (59-48) al término de la primera parte.
Ya en el tercer cuarto, Reaves quiso tomar el protagonismo que no tuvo en los minutos previos. Vuelta al intercambio de canastas, pero con un ritmo más pausado y posesiones más largas. Un triple de LeBron ponía la máxima (+14) y, a partir de ahí, las opciones de remontada de los visitantes se esfumaban.
Ni siquiera los lanzamientos extraterrestres de Curry conseguían levantar el ánimo en los visitantes. Un increíble mate de Wiggins sobre Davis encendió a los de San Francisco, pero duró poco tiempo. Davis contagió la intensidad defensiva a un grupo que peleaba por cada balón suelto. Robos y salir a la contra. Minutos de desenfreno que dejaban el 86-68 en el marcador para entrar en el último cuarto.
Los minutos finales sirvieron para ejemplificar lo visto en la conclusión del tercero. Poco acierto de los Warriors, transiciones rápidas de Lakers y buena defensa sobre el aro de Davis y Vanderbilt. Le costaba un mundo a los Warriors anotar una canasta.
Ya con el partido resuelto, LeBron volvió a asistir desde el poste a los secundarios que tomaban protagonismo. Los últimos cinco minutos sirvieron de poco, con los poco habituales dejando buenas jugadas en un final más abultado de lo que se podría creer en un inicio.
LeBron terminó con 21 puntos, 8 rebotes y 8 asistencias. Davis volvió a ser decisivo. El interior acabó el partido con 25 puntos, 13 rebotes y 4 tapones. Por parte de los Warriors, Curry finalizó con 23 puntos.
Ejercicio de esfuerzo grupal de los Lakers, que no quieren desaprovechar ninguna oportunidad. Los de Darvin Ham se quitan así la espina del Game 2 y el mal nivel que mostraron en la segunda mitad del mismo. Declaración de intenciones de un equipo más unido que nunca, con LeBron y Davis a la cabeza y que, aunque en su momento pareciera lejano, invitan a creer que todo es posible.