Lo perdió Demichelis
Armó un equipo inentendible, sin el equilibrio de Aliendro, tardó en los cambios y no acertó. ¿Canchereó después de ganar el superclásico la semana pasada?
Apenas comenzado a desandar su camino como entrenador y ante un arranque un poco errático, el mayor acierto de coach Martín fue el de no dejar solo a Enzo Pérez en la trabajosa labor de la contención. El mendocino en soledad lidiaba con externos que le volaban por los costados y el equipo, larguísimo, sufría embates ante el enorme terreno libre. Siempre atento a la corrección, una virtud de este cuerpo técnico de River, la decisión del DT fue incluir a Rodrigo Aliendro para colaborar en la recuperación, al mismo tiempo que se trabajó conceptualemente para que los jugadores estuvieran rodeados entre sí, con las líneas más juntas y un equipo más corto. Lo mejor de River este año se dio a partir de esta decisión, Aliendro se convirtió en imprescindible y el volumen de juego de River creció notablemente.
Se equivocó feo Demi. Erró. Quizás lo mareó la semana pasada. Se puso por encima del equipo. Canchereó. Hizo una de más, de esas que cuestan caras. ¿Errores de principiante? Tal vez. ¿Derrotas que aleccionan? Quizás. Pero van varias de éstas. En este fútbol argentino de hoy hay que administrar lo que funciona bien y no meter mucha mano. Si querés, una vez aceitado el engranaje, te podés poner a jugar a las innovaciones. Pero con una base constituida. River no es Manchester City, o sea, todavía no hay un equipo consolidado del todo para tirar estos chiches tácticos.
Tres apuntes que modestamente recomendamos desde aquí al entrenador de River:
- lo que anda bien no se toca
- Aliendro es el pulso del equipo, insacable
- mejor los cambios a tiempo
Respecto del último punto, llamó la atención la demora en las sustituciones. No tanto por el partido de Rondón, no es la idea caerle al venezolano, sino porque enseguida se vio que River sufría con los pasajes de defensa a ataque de Talleres. Si se veía por tele, me imagino que al lado del campo de juego se vería más claro aun. Sin embargo, Aliendro nunca ingresó, las opciones fueron Solari, Suárez, Borja (no se comprende por qué no es primera opción ante Salomón) y ¡Paradela! Realmente, nunca se entendió, ni lo que pensó antes ni durante el entrenador. Lamentablemente, las únicas explicaciones las tenemos en las conferencias de prensa, pero allí hay más excusas o recepción de elogios que argumentaciones.