El Madrid pierde el blindaje
El equipo blanco ha encajado seis goles en los últimos dos partidos tras haber mantenido la portería a cero en seis de sus siete encuentros anteriores.
Quizás ambas situaciones sean exageradas y ninguna resulte representativa de lo que ha sido la temporada de los blancos en la faceta defensiva, lejos de la seguridad de las tres últimas campañas, pero sin llegar a la fragilidad de las anteriores, en las que el Madrid superó o rozó los 70 goles recibidos. Desde la temporada 2019-20, el equipo blanco cerró la temporada con 43, 46 y 50 goles encajados en todas las competiciones. Esta, con cinco partidos disputados menos y nueve o diez partidos aún por delante, lleva los mismos 50. En Liga, la tendencia es similar: 25, 28, 31 y, ahora, 30 a falta de seis jornadas.
Ancelotti se ha encontrado numerosos inconvenientes: la caída de nivel de Alaba respecto a la temporada pasada, el proceso de adaptación de Rüdiger (el alemán estaba mal colocado en el primer gol del Almería), las lesiones de Mendy (en los últimos tres meses sólo ha jugado 28 minutos)… Incluso Courtois, invulnerable otras temporadas, se ha perdido partidos por problemas diversos.
La temporada empezó con fisuras. El equipo blanco no consiguió mantener la portería a cero en dos partidos consecutivos hasta el Mundial. Pero no eran grandes grietas. Sólo el RB Leipzig (después de 16 partidos) y el Rayo Vallecano consiguieron hacerle más de dos goles (tres cada uno) al Madrid. Después de la cita de Qatar, los de Ancelotti alternan rachas de imbatibilidad atrás con partidos de fragilidad acentuada. Nueve equipos han conseguido hacerle al menos dos tantos en los 31 encuentros posteriores al parón mundialista.
Cuando la gestión de la plantilla parecía la principal preocupación en este periodo de entreguerras hasta la final de Copa y la semifinal de Champions, la vulnerabilidad en defensa ha emergido como problema en las filas blancas. Ancelotti lo manifestó en Girona (“Si no tenemos compromiso defensivo, este equipo tiene dificultad para ganar los partidos”) y volvió a dejar un recado a sus jugadores tras los dos encajados contra el Almería. “No entiendo que en dos partidos hayamos encajado seis goles; nos hemos relajado. Nos ponemos 3-0, bajamos la concentración y nos marcan. Me enfado. Luego 4-1... y otra vez nos marcan. Que sirva como un toque de atención bueno”, avisaba el técnico madridista. Y en el horizonte, la amenaza de Haaland…