El juvenil español que tiene enamorado a Bolivia
Carlos Sejas está en el top-20 de los centrocampistas más prometedores de la lista del Observatorio del fútbol CIES. Es internacional Sub-20 con el país sudamericano, pero puede jugar con España.
La historia del “chaval” es curiosa. De padres bolivianos, el futbolista nació en Madrid el 10 de enero de 2004 y vivió en la capital de España hasta los dos años. Fue en 2006 cuando Carlos Sejas padre lo lleva a Bolivia para que lo cuidara su abuelo y desde que llega al país en el que ha crecido su progenitor le empieza a decir “chaval”, un apodo que le gusta, que ha calado y por el que lo conoce todo el mundo.
El futbolista, que acaba de fichar por la agencia RG FOOTBALL, dio sus primeras patadas a un balón a los 6 años en un equipo de barrio llamado Mundo Joven. A los 10 años le llevan a Real Cochabamba para pasar con 13 a Wilstermann y después a MI Llajta, club al que llega como refuerzo para jugar la Conmebol Sub-13 y con 15 años se queda definitivamente hasta los 17 que prueba con Aurora. La salida de Julio César Baldivieso y el ascenso desde el filial de Sergio Zeballos le llevaron a que el nuevo técnico le hiciera debutar otorgándole confianza y ganándose el llevar la batuta del equipo.
Sejas lleva casi un año y medio como profesional. Empezó jugando de extremo y de ahí pasó al centro del campo. Con el equipo del pueblo ha disputado 55 partidos desde 2021 en los que ha repartido tres asistencias. Su calidad no ha pasado desapercibida y la selección Sub-20 de Bolivia ha contado con el futbolista en cuatro partidos de la fase de grupos del Sudamericano Sub-20, una circunstancia que no impediría que fuera convocado con España.