El gol en propia puerta de Trippier le da al Chelsea algo por lo que sonreír en el final de una temporada miserable

LAS COSAS DEBEN estar mal en Chelsea si incluso Newcastle no pierde en Stamford Bridge.

Andy Dillon, The Sun

De hecho, el desesperado jefe interino Frank Lampard necesitó un gol en propia meta para evitar otra derrota en su undécimo y último partido como responsable temporal.


Lampard entregó el lunes al entrante Mauricio Pochettino con su reputación aún consagrada entre los fanáticos que cantaron su nombre mientras se agotaba el último partido de una temporada caótica.

A partir de ahora todo es como dijo Lampard en su rueda de prensa previa al partido 'su problema'.

Y hay muchos de ellos para que el argentino los aborde consiguiendo una melodía de un escuadrón de gran tamaño y bajo rendimiento en la parte superior de la lista.

Las visitas regulares de Newcastle a este campo generalmente se traducen en tres puntos fáciles para The Blues.

No ganan aquí desde mayo de 2012 cuando Lampard estaba en el Chelsea.

Los Geordies perdieron las diez visitas posteriores y anotaron solo tres goles en el medio.

El hecho de que hayan estado más cerca desde entonces de ganar en este terreno del oeste de Londres dice mucho sobre la caída del Chelsea y las ambiciones ascendentes del Toon Army.

El presidente estadounidense del Chelsea, Todd Boehly, estuvo ausente, pero Behdad Eghbali, su compinche o socio en el crimen, según su punto de vista, estuvo allí para presenciar cómo se desvanecía la primera temporada bajo la nueva propiedad.

El resultado fue en gran medida irrelevante con Chelsea condenado a un primer semestre en la Premier League desde 1996 y celebrando a Newcastle simplemente en un día libre para regocijarse por regresar a la Liga de Campeones después de 20 años.

Al menos la mitad del otro extremo estaba lleno de Geordies con el torso desnudo que normalmente no necesitan clima cálido para ir con el torso desnudo. Había más tetas masculinas a la vista que una edición ómnibus de Springwatch.

El jugador del año del Chelsea es Thiago Silva, tiene 38 años. El gol de la temporada fue de Conor Gallagher.

Fue un ganador en el minuto 90 en Crystal Palace el 1 de octubre.

Da una indicación de cuán plano ha sido el resto de la temporada. Ambos hombres parecían un poco avergonzados de recibir cualquier tipo de premio cuando todo lo que realmente querían era terminar con estos últimos 90 minutos.

Pero parecía que iban a ser unos largos y dolorosos últimos pasos hacia la puerta de salida de esta campaña verdaderamente horrible cuando Newcastle tomó la delantera a los nueve minutos.

Fabian Schar bombeó un gran balón cruzado en diagonal a Allan Saint-Maximin en el flanco izquierdo.

Él, a su vez, informó a Eliot Anderson sobre la superposición. El último golpe bajo a través del área de seis yardas encontró a Gordon completamente indiscutible y sin nada más complicado que hacer que desviar el balón más allá de Kepa.

Una jugada impactante pero desesperada, Lampard simplemente se alejó cuando la pelota entró, abriendo una botella nueva de Lucozade Sport como si lo hubiera visto venir.

Al menos por una vez inyectó un poco de vida a Chelsea. Apretaron el paso y tomaron la iniciativa al menos durante un rato. 

El portero suplente Martin Dubravka hizo una parada de emergencia cuando un cabezazo de Thiago Silva desde un córner fue desviado hacia la portería por Kieran Trippier.

Dubravka estaba haciendo su primera aparición en Newcastle desde mediados de febrero y probablemente no esperaba estar ocupado en Stamford Bridge.

Pero también tuvo que ser rápido con tres atajadas instintivas cuando se acercaba el medio tiempo.

Los goles han sido difíciles de conseguir para el Chelsea. No ha marcado menos de 40 goles en liga en una sola temporada desde 1924. Ahora lo ha hecho.

Incluso cuando llegó el último de este año decepcionante, estaba fuera de la mano del patrón del Newcastle, Trippier.

Internando desde la derecha, Sterling atravesó el área y disparó hacia la esquina opuesta de la portería donde rebotó en el desafortunado defensor.

Con poco para jugar, la segunda mitad vino y se fue, aunque el suplente del Chelsea , Chrisitan Pulisic, estuvo cerca dos veces en los últimos cinco y el debutante del Newcastle , Lewis Miley, golpeó el larguero con diez minutos para el final.


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