Botafogo rompe racha invicta, pierde ante Goiás, pero sigue líder del brasileño
El equipo se da la vuelta fuera de casa en una actuación poco creativa y sin algunos titulares desde el inicio
Diogo Dantas, O GlogoCon la vista puesta en el inicio de la disputa de los octavos de final de la Copa do Brasil, contra el Athletico-PR, a mitad de semana, el Botafogo interrumpió la secuencia de victorias del brasileño con un tropiezo ante el Goiás, fuera de casa. , cuando estaba sin algunos titulares y se llevaba 2 a 1.
Después de adelantarse en el marcador con Tiquinho, de penalti, el conjunto carioca se hizo con el empate al final de la primera etapa, y no pudo retomar el liderato en el segundo tiempo, cuando sufrió el vuelco. El resultado mantiene al Botafogo en cabeza, con 15 puntos, ahora a uno del Palmeiras, todavía con grasa que quemar.
El equipo no pierde un partido desde el 8 de marzo de este año, cuando fue derrotado por Portuguesa en el Campeonato Estatal, hace más de dos meses. Ante el Goiás, el equipo tuvo mucha dificultad para crear, con malas actuaciones de Eduardo y Tchê Tchê, y solo marcó con Tiquinho, de penalti. Bruno Melo y Maguinho lograron para los locales. El sábado, el Botafogo vuelve a la cancha por el brasileño y se enfrenta al Fluminense.
¿Qué no funcionó?
El líder salió al campo con algunos cambios, y Luis Castro apostó por Gustavo Sauer en lugar de Junior Santos, preservado. Matías Segovia, que venía despuntando, fue operado de la mano tras una fractura. Otra ausencia sentida fue la de Víctor Cuesta, sancionado. La formación cambió la característica de atacar con velocidad a una mayor construcción del juego en el interior. Era un equipo más compacto y reactivo, intentando no dar demasiados espacios al rival. El vínculo directo con Tiquinho para generar combinaciones desde allí fue la principal estrategia, que pronto se volvió ineficaz.
Goiás fue un rival que partió temeroso de enfrentarse al líder, pero se soltó a los 20 minutos para ejercer mayor presión, que el Botafogo solo soportó hasta el final de la etapa inicial. Jugando en el extremo izquierdo, Lucas Perri intercedió con buena defensa. Posteriormente, la defensa aguantó los ataques con balones aéreos.
Tras aguantar las primeras acciones, el Botafogo reaccionó. Avanzó principalmente por la banda izquierda, con Victor Sá y Marçal, y creó la jugada del primer gol del partido. En un balón elevado en el área y luego rebotado, Gustavo Sauer partió el intento de pase de Tiquinho, sacó un tiro por debajo y el árbitro consultó al videoarbitro para confirmar el penalti. El propio Tiquinho anotó, en el minuto 32, anotando su sexto gol y quedando más aislado en el pichichi del campeonato.
Después del gol, la formación compacta del Botafogo trabajó para tener más posesión del balón y recuperarlo en el campo de ataque, pero no se consolidó el papel de Tchê Tchê, Marlon Freitas y Eduardo. Goiás aumentó la presión y logró el empate a través de un balón elevado en el área, que en el rebote quedó para que el defensa Bruno Melo empatara en el descuento. Una vez más entró en acción el videoárbitro y se validó el gol.
Vuelve sin la misma atención
En el camino de regreso al segundo tiempo, Goiás se atrevió nuevamente a explorar el lado derecho de la defensa de Botafogo, que ya había cedido espacios en la etapa inicial. A cambio de pases entre líneas, la defensa paró y arriesgó en la línea de fuera de juego, y el gol de la vuelta acabó anulado. El movimiento disparó la alerta del técnico Luis Castro, quien impulsó el ingreso de Junior Santos en lugar de Gustavo Sauer, quien no recompuso el pasillo por el costado derecho.
El cambio incluso le dio un nuevo aliento al ataque, pero el mapa de la mina seguía en el mismo lugar. En una jugada de nuevo por ese lado, procedente de un lateral, llegó un balón elevado en el área del Botafogo, que tapó Lucas Perri y Maguinho completó por arriba de la línea. Luis Castro volvió a entrar en escena para más intercambios, con Lucas Fernandes y Luis Henrique, en un intento de darle más creatividad y fuerza al ataque en el acercamiento de Tiquinho.
La jugada principal, sin embargo, fue el mano a mano de Junior Santos, que trató de usar la fuerza y la velocidad. El Botafogo intentó la última carta para romper el bloqueo del Goiás con Carlos Eduardo en lugar del defensa Segóvia, pero en los minutos finales los locales aguantaron toda la presión y lograron salir con méritos del descenso ante el líder.