Boca, de la Libertadores al Superclásico: cómo será la semana antes de visitar a River en el Monumental
El equipo de Almirón quiere aprovechar el envión anímico que generó el claro triunfo ante Racing; el regreso de Langoni y la baja de Payero, los puntos salientes de la planificación
El primer compromiso que aparece en la agenda se llama Colo Colo y está programado para este miércoles a las 21. Será el tercer encuentro del Grupo F de la Copa Libertadores, pero también mucho más que eso. Desde aquella noche bochornosa de 1991, en la que los locales avanzaron a la final de esa edición luego de una invasión de público y una verdadera batalla campal que terminó con detenidos y el Maestro Oscar Tabárez ensangrentado, cada cruce entre el Xeneize y los trasandinos va más allá del juego en sí.
Los dos equipos llegan como líderes con 4 puntos y el que gane allanará su camino a los octavos de final. En busca de ese objetivo, Boca trabajó este lunes en su predio de Ezeiza para delinear la formación inicial y la lista de convocados que este martes se subirá al avión rumbo a Santiago.
En la previa, la gran noticia es que Luca Langoni pudo trabajar al mismo ritmo que sus compañeros por primera vez desde el desgarro que sufrió frente a San Lorenzo el 12 de abril (lesión muscular grado 1 en el isquiotibial derecho, según el parte médico oficial). Por eso, según pudo averiguar LA NACION, la idea del cuerpo técnico es que viaje a Chile para que juegue unos minutos y vaya recuperando ritmo de competencia.
Si bien todavía es apresurado confirmarlo, serían muy pocas las dudas en relación a los 11 que salieron a jugar frente a Racing anteanoche. El posible equipo para enfrentar a Colo-Colo estaría conformado por: Sergio Romero; Luis Advíncula, Marcelo Weigandt, Facundo Roncaglia, Nicolás Figal, Valentín Barco; Martín Payero o Cristina Medina, Alan Varela, Pol Fernández, Sebastián Villa; Miguel Merentiel o Luis Vázquez.
Las dos incógnitas tienen sus motivos, y tienen que ver en la continuidad de la agenda azul y oro. Expulsado ante la Academia, Payero no podrá jugar frente a River. Entonces, sonaría lógico que si enfrente al conjunto chileno. Sin embargo, no sería descabellado que Almirón aproveche el compromiso copero para que Medina llegue con buen ritmo al domingo.
Algo similar ocurre con el delantero de punta. Se deduce que quien sea titular este miércoles no salga a jugar desde el inicio frente al Millonario. Tanto Vázquez como Merentiel realizaron una muy buena actuación ante Racing, no solo por su potencia ofensiva, sino también por la solidaridad de ambos a la hora de presionar y recuperar el balón en la salida rival.
Como suele suceder ante estos escenarios, nadie en Boca quiere hablar del Superclásico de manera anticipada. “El partido del miércoles es muy importante para nosotros y el foco está puesto allí. A partir del jueves pensaremos en River”, le confió a este diario alguien que está en el día a día del plantel.
Recién entonces comenzará la planificación del partido del próximo domingo. El jueves, ya en Buenos Aires, Almirón dispondrá de tres entrenamientos antes de visitar al conjunto de Núñez el domingo, a las 17.30.
En este proceso de trabajo iniciado hace apenas tres semanas, el desafío de enfrentar a River motiva mucho. No solo por lo que siempre significa jugar un Superclásico, sino porque puertas adentro consideran que el equipo está en la curva ascendente de su evolución como tal.
De hecho, sienten que la mejoría fue evidente, que lograron sorprender a Racing y que visitar al cómodo puntero de la Liga Profesional, que además viene de racha, es una motivación más en este camino.
¿Qué puede esperarse en la formación de Boca del domingo en el Monumental? Por lo pronto, la de Payero será una ausencia sensible. El ex Banfield venía elevando su nivel desde el arribo de Almirón y se había ganado la titularidad. Sin embargo, su expulsión por agredir a Nardoni le impedirá decir presente ante River.
El que pica en punta para reemplazarlo es Medina, aunque todavía falta mucho para saber lo que decidirá el DT. Por otro lado, ya sin el factor sorpresa que significó verlo en esa posición contra la Academia, Luis Advíncula seguramente será un elemento más en lo vinculado a la ofensiva xeneize. Sobre todo, porque el tándem con Weigandt funcionó a la perfección a la hora de relevarse en las funciones.
En medio de una seguidilla de partidos que no da tregua (en abril jugó 8), Boca es consciente de que el inicio de mayo tiene dos grandes desafíos que pueden reencauzar su semestre después de un comienzo muy malo. Y a diferencia de lo que sucedía hasta hace unas semanas, ahora tiene argumentos futbolísticos para ilusionarse.