AZ ALKMAAR 0-WEST HAM 1 ¡Fornals vale una final!

El español marcó en el descuento para certificar el pase del West Ham a la final de la Conference League. Los de David Moyes se jugarán el segundo título europeo de su historia 47 años después.

Pablo Montaño
As
Casi 50 años ha tenido que esperar el West Ham para volver a una final europea. Tras una temporada de sinsabores en la Premier League, donde sigue inmerso en la lucha por el descenso, los pupilos de David Moyes tendrán la oportunidad, en Praga, de proclamarse campeones de la Conference League en la segunda edición de la competición. Cuando todo parecía que el resultado de la ida daría el billete a los Hammers, apareció Pablo Fornals para, en el tiempo de descuento, permitir al West Ham celebrar el pase con una victoria (0-1).

El Eintracht de Frankfurt, quien a posteriori se proclamaría campeón de la Europa League 2021/2022, privó el curso pasado al cuadro londinense de disputar la tercera final europea de su historia. La primera fue en 1965, la segunda en 1976. Ambas de la Recopa de Europa. Pero esta vez el AZ Alkmaar no fue rival suficiente para privar al equipo del London Stadium de su final europea. Esta vez, el West Ham sí podrá luchar por su segundo título europeo en Praga tras el conseguido hace 47 años ante el 1860 Múnich.

Los Hammers estarán en la final de la tercera competición europea tras haber ganado todos sus partidos de fase de grupos y tan solo conceder un empate –en la ida de cuartos de final ante el Genk– en la fase eliminatoria. Es decir, el mejor equipo de la Conference League 2022/2023, o al menos el más regular, estará en Praga.

Paquetá y poco más

Al West Ham le faltó fluidez con la pelota en los primeros compases de partido, ya que las combinaciones entre los jugadores Hammers apenas se prolongaban durante unos pocos toques. El balón era del AZ Alkmaar. No obstante, los pupilos de David Moyes estaban cómodos. Mucho. El cuadro neerlandés se relacionaba mejor por fuera que los londinenses, intentado generar peligro por ambas bandas pero sin llegar a ser nada concluyentes de cara a la meta rival. Sin ir más lejos, los locales no dispararon a portería en todo el primer tiempo.

En medio de esa pasividad y ritmo bajo de encuentro, llegó la primera gran ocasión, y esta cayó del lado Hammer. El disparo de Lucas Paquetá, con rosca y desde fuera del área, se estrelló en el palo cuando el marcador encaraba la primera media hora de partido. Aunque la jugada pudo parecer que surgió de la nada, Michail Antonio y su actuación durante los primeros 45 minutos tuvieron mucha culpa de ello. El jamaicano, perdido cual islote en la punta del ataque, dio una masterclass jugando de espaldas.

Tenía que ser Fornals

El AZ Alkmaar necesitaba un gol, y lo demostró en el arranque de la segunda mitad. Con un mayor dinamismo en sus ataques, el ariete Vangelis Pavlidis empezó a acumular acciones de peligro. Primero reclamó un penalti por falta de Nayef Aguerd y, minutos después, puso a prueba a Alphonse Aréola, aunque su disparo quedaría anulado por posición antirreglamentaria.

Con los 11 jugadores del West Ham en campo propio, y Declan Rice como timón y pilar en el que se sostentaba el plan de David Moyes, los locales comenzaron a rondar el gol que igualase la eliminatoria. Las circulaciones de la segunda mitad sí estaban generando cierto peligro sobre la meta londinense. No obstante, a los neerlandeses se les acabó la gasolina demasiado rápido.

No hubo aluvión final de llegadas por parte de los pupilos de Pascal Jansen, y sí un gol del West Ham. En el último minuto del tiempo añadido, Pablo Fornals, que había entrado desde el banquillo en la segunda mitad, firmó la clasificación para la final de Praga con un golazo. Robo en el centro del campo, caño en la conducción y definición perfecta ante Matthew Ryan. La reivindicación perfecta para el centrocampista español tras una temporada complicada por la falta de minutos. Ahora sí, los pupilos de David Moyes eran finalistas de la Conference League.

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