Ante el avance de Ucrania en Bakhmut, Rusia apuesta por los ataques aéreos por la falta de progreso en tierra
Lanzó hoy el décimo contra Kiev en lo que va del mes y atacó también Leopólis y Krivói Rog, mientras los mercenarios del Grupo Wagner admitían que no podían acabar de capturar Bakhmut ante la feroz resistencia ucraniana
El Ejército ruso atacó con “armas de alta precisión desde el mar puntos de despliegue y centros de entrenamiento de las Fuerzas Armadas de Ucrania, así como almacenes de municiones, armas y equipos fabricados en el extranjero”, señaló el portavoz del Ministerio de Defensa de Rusia, teniente general Ígor Konashénkov.
Aseguró que “todos los objetivos fueron alcanzados” y que, como resultado de los ataques, “se alteró el suministro, entrenamiento y formación de reservas de las tropas ucranianas para realizar tareas en las áreas de combate”.
Drones y misiles
Según Kiev, en el ataque de esta madrugada Rusia empleó sin gran éxito un total de 22 drones Shahed 136/131 de fabricación iraní y seis misiles de crucero Kalibr.
Las autoridades ucranianas indicaron que los sistemas de defensa antiaérea abatieron 19 drones y tres misiles.
El jefe de la administración militar de la provincia de Kiev, Serhiy Popko, informó de que los rusos lanzaron contra la capital varias oleadas de drones con breves intervalos, con el fin de intentar desgastar la defensa antiaérea ucraniana e influir psicológicamente en la población civil.
No obstante, aseguró, todos los aparatos fueron derribados.
En Krivói Rog, ciudad en la región oriental de Dnipropetrovsk, al menos dos personas, una mujer de 64 años y un hombre de 45, resultaron heridas a consecuencia del ataque nocturno.
“El enemigo atacó una empresa industrial privada (...) Varios talleres resultaron seriamente dañados y se incendiaron algunos edificios”, declaró el jefe de la administración militar regional, Serhiy Lysak.
En Leópolis, en el oeste de Ucrania, las autoridades no informaron de víctimas ni de daños.
La batalla de Bakhmut
Sobre el terreno, la intensidad de los combates alcanza su punto álgido en la ciudad oriental de Bakhmut, escenario de una batalla que se prolonga ya casi diez meses.
El líder de la compañía de mercenarios Grupo Wagner, Yevgueni Prigozhin, admitió hoy que se libran “durísimos combates” en Bakhmut y descartó la pronta captura total de esa ciudad.
“Informo a todos oficialmente: Bakhmut aún no ha sido tomada. Hay una manzana que se llama ‘Avión’. Es una fortaleza inexpugnable formada por una hilera de edificios altos que se encuentra en el suroeste de Bakhmut. Allí se libran durísimos combates, durísimos”, dijo el jefe de los wagneritas.
Insistió en acusar al mando militar de Rusia de las dificultades que tienen sus hombres para capturar totalmente la ciudad, que, según él, controlan ya en un 98 por ciento.
Prigozhin reconoció que Bakhmut “difícilmente será tomada totalmente mañana o pasado mañana”.
La viceministra ucraniana de Defensa, Hanna Malyar, aseguró anoche que actualmente las tropas ucranianas “controlan la parte suroeste de Bakhmut”.
Defensa y contraataque
Y es que las tropas ucranianas no se limitan a defender las pocas posiciones que mantienen el oeste de la ciudad, devastada por la acciones militares, sino que contraatacan en aéreas al norte y al sur de las ciudad y, según expertos militares ucranianos, en caso de éxito podrían cercar a las fuerzas rusas que se encuentran en Bakhmut.
“Nuestras unidades presionan al enemigo en los flancos cuando aparece una oportunidad, y continúan avanzando sobre el terreno”, dijo el portavoz del mando oriental de las Fuerzas Armadas de Ucrania, Serhiy Cherevaty.
Agregó que durante el día las unidades ucranianas “han conseguido avanzar hasta 500 metros en diferentes direcciones”.
Cherevaty indicó que “Bajmut continúa siendo una prioridad” para los rusos, pero destacó que se puede decir que “en cierto modo” las tropas ucranianas han tomado la iniciativa.
El G7 reafirma su compromiso
Con los combates en marcha, Ucrania recibió hoy un nuevo e importante espaldarazo: los líderes del G7 desvelaron hoy en su cumbre en la ciudad japonesa de Hiroshima una nueva ronda de sanciones a Rusia y reafirmaron su compromiso para apoyar a Kiev a nivel financiero, humanitario, militar y diplomático.
En un comunicado, subrayaron que no es posible lograr una “paz justa” sin la “retirada completa e incondicional” de las tropas rusas del territorio de Ucrania.
Con ello las siete democracias más industrializadas del mundo se alinearon con la postura del presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, que rechaza toda negociación con Moscú mientra haya un solo soldado ruso en territorio ucraniano.